Visita de presidente de Irán a Nicaragua busca instalar bases que apoyen sus disputas con Estados Unidos

Medios oficialistas de la dictadura sandinista informaron en días recientes que la visita del Presidente de la República Islámica de Irán, Ebrahim Raisi, quien llega a Nicaragua este martes 13 de junio, es para estrechar lazos de cooperación política, comercial, económica y científica.

No obstante, para el economista Enrique Sáenz considera que la visita del mandatario iraní al país es con la intención de establecer bases que le sirvan de apoyo en sus disputas con Estados Unidos.

“Es evidente que Ortega y sus compinches de Venezuela y de Cuba se prestan gustosos a  jugar ese papel, así que está claro que buscarán cómo proyectar la imagen de alianza estratégica, revestida con los consabidos discursos antiimperialistas y antioccidentales”, expresó el economista en el medio aliado 100% Noticias.

Sáenz destaca que la intención de Irán es establecer “cabezas de playa” en América Latina porque necesita de esas bases. Así mismo, recordó que el ex presidente de ese país, Mahmud Ahmadineyad visitó Nicaragua dos veces, en 2007 y 2012, para “cumplir” varias misiones que sólo dejaron un reguero de acuerdos, memorandos de entendimiento y promesas, todas sin cumplir.

LEA: Daniel Ortega aparece como el personaje más criticado y despreciado por la población nicaragüense

Entre las promesas de Ahmadineyad, Sáenz mencionó la construcción de 4 centrales hidroeléctricas, la edificación de diez mil viviendas populares, una planta de construcción de equipos agropecuarios, la entrega de 4 mil tractores, la construcción de 5 plantas procesadoras de leche, la construcción de 2 muelles adicionales en Corinto, de la cual se conoció que se invertiría el monto de 36 millones de dólares. Así mismo, fábricas de cemento, sistemas de riego y de agua potable y la construcción de un puerto de aguas profundas en el Caribe.

“¿Qué pasó de esas promesas?”, se preguntó el economista.

El experto en temas económicos recordó además que la lista de promesas se abultó con más acuerdos comerciales, científicos, culturales y de inversión.

“Hasta acordaron resucitar la construcción de la refinería, ‘El supremo sueño de Bolívar’; un mega proyecto acariciado por Ortega tanto, tan acariciado, que Hugo Chávez colocó dos veces la primera piedra de la bendita refinería que al final quedó en un plantel de almacenamiento de combustibles”, subrayó.

18 acuerdos con Irán sin prosperar

Sáenz advirtió que Nicaragua firmó con Irán al menos 18 acuerdos más en el 2022, los cuales no han prosperado por carecer de viabilidad, aún cuando asumieran disposición de cumplir de parte de los iraníes.

“La realidad es que son acuerdos que carecen de viabilidad, acuerdos culturales ¿Qué tienen de común la cultura persa con la nicaragüense? Ni los nicaragüenses hablan persa, ni los iraníes hablan español”, resalta Sáenz.

En cuanto a los acuerdos científicos, Nicaragua carece de recursos humanos e infraestructura científica para posibilitar la cooperación con Irán. “Todos estamos enterados del estado deplorable en que ha postrado la dictadura a la Educación Superior”, señaló.

A su criterio, los acuerdos con Irán no es cuestión de voluntades sino de realidades, por lo que insiste en que carecen de viabilidad. ¿Qué producimos los nicaragüenses que la economía de Irán lo necesite? El café y el azúcar lo compran más barato a proveedores cercanos y en cuanto al arroz, los frijoles y el queso, Sáenz indica que los iraníes no comen gallopinto.

VER TAMBIÉN:  Piden a la OEA declarar a la dictadura como un Estado terrorista que representa una amenaza para la región

Para él la distancia y la falta de rutas comerciales, además de la infraestructura logística, tornan ilusorio cualquier acuerdo comercial; la prueba esta en que han pasado 16 años y en las cuentas comerciales de Nicaragua ni siquiera figura Irán. “Son lazos comerciales inexistentes”, expresa.

Intereses con Irán son sólo de la cúpula del poder de Ortega

Enrique Sáenz destaca que no existe ningún interés del pueblo nicaragüense con el de Irán, porque esto sólo lo tienen las cúpulas de Ortega y su círculo de mafiosos y el círculo de poder iraní.

“La única posibilidad es que Irán sea utilizado para que la mafia en el poder pueda recircular los cuantiosos recursos que obtiene por los negocios de la electricidad, el combustible y el oro; otros turbios negocios y transacciones financieras oscuras”, señaló Sáenz.

Para él, el discurso de Daniel Ortega que prevalecerá durante la visita del presidente de Irán se basará en lo mismo, sobre las patrañas del “golpe de estado”, los ataques a la Iglesia Católica y a Estados Unidos y probablemente la adquisición de una bomba atómica.

“De lo que no va a hablar Ortega será de las remesas de los nicaragüenses en el exterior, principalmente de las que provienen de los Estados Unidos, del CAFTA y del socio principal de Nicaragua, tampoco lo hará de los inversionistas norteamericanos”, dijo.

A criterio del economista Enrique Sáenz, es casi seguro de que hay acuerdos escondidos entre Irán pero no para el beneficio del pueblo de Nicaragua sino solo para el pequeño circulo de los Ortega Murillo.