OEA vuelve a sesionar sobre la crisis de Nicaragua, considerada una de las más graves en la región

El Consejo Permanente de Derechos Humanos de la OEA sesionó nuevamente este lunes sobre la crisis sociopolítica que vive Nicaragua desde el 2018, tras el estallido social. Mientras el representante de Ortega en ese organismo se pronunció en contra de la sesión, a pesar de ya haber hecho oficial su salida del organismo.

Michael Campbell Hooker, representante del régimen de Daniel Ortega, expresó su rechazo a la sesión por Nicaragua mientras leía el pronunciamiento, cargado de expresiones “Murillistas” lleno de ofensas y calificativos.

“Nicaragua rechaza de manera categórica la convocatoria de esta sesión ilegítima, señalando que únicamente procura perpetuar la campaña de mentiras y agresiones en contra del pueblo digno, libre, soberano y humilde de Nicaragua”, expresó el representante de Nicaragua para posteriormente leer la denuncia a la Carta de la OEA.

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Por su parte Daniel Zovatto, Director Regional para América Latina y el Caribe en el Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA Internacional), expresó durante su intervención ante el Consejo Permanente de Derechos Humanos en la OEA, que la crisis que vive en Nicaragua es una de las más graves para el retorno de la democracia en la región a partir del año 1978.

“En 5 años de vida profesional en el tema electoral, nunca había visto una situación en la que un régimen autoritario encarcelara a los siete principales aspirantes de la oposición y que cancelara las personerías jurídicas y que el proceso electoral tuviese lugar en el marco de una grave reflexión política que fue descrita muy bien aquí por las dos personas inéditas”, dijo Zovatto.

Pide suspender financiamientos económicos en marcha

Zovatto pidió a la OEA actuar con toda la firmeza y la determinación que el caso amerita y que se mantenga siempre abierta la puerta del diálogo, a la vez que hizo el llamado a los organismos financieros a suspender de manera inmediata todos los desembolsos que se encuentran en marcha.

“En eso estamos de acuerdo, en una oferta de diálogo genuino, como se dijo acá con un aumento de la presión internacional que sea sostenible y contundente sobre el régimen de Daniel Ortega, el poder de manera ilegítima, es muy importante limitar un margen económico de la dictadura, aumentando las consecuencias económicas que tiene la represión política y en este sentido los organismos el Banco Interamericano de Desarrollo, al Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de Integración Económica, suspender todos los desembolsos de los créditos que ya están en marcha”, dijo firmemente Zovatto.

Nicaragua continúa bajo estado policial y de grupos afines a Ortega

Mientras Antonia Urrejola, presidente de la CIDH en la OEA, quien documentó toda la represión de Ortega desde el 2018, afirmó que Nicaragua continúa bajo un estado policial que afectan las libertades de la población nicaragüense.

“La población nicaragüense continúa afectada por la instalación del estado policial que posibilita la coordinación entre la Policía Nacional y grupos simpatizantes del gobierno para agredir, vigilar amenazar y hostigar a cualquier persona identificada como opositor al gobierno actual”, indicó Urrejola.

Antonia Urrejola también subrayó sobre las condiciones de derechos humanos en las que se encuentran las presas y presos políticos, las cuales consideró como “muy graves”.

En tanto, los Estados miembros coincidieron, en una evaluación colectiva sobre el tema de Nicaragua, en la promoción y facilitación de un diálogo político y una negociación entre las distintas partes, que acuerden la restauración del orden democrático, en donde se incluya la liberación de los presos y presas políticas y la implementación de reformas electorales que garanticen unas elecciones libres y observadas.

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De igual manera, reconocieron que Nicaragua tiene el derecho a renunciar a ser un Estado miembro de la OEA, pero que aún tiene obligaciones por dos años más con el organismo.

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