Presidente de Argentina “busca aislar políticamente al régimen de Nicaragua”, dice Félix Maradiaga

El ex reo de conciencia de Nicaragua y politólogo, Félix Maradiaga, valoró como oportuna la decisión del actual presidente de Argentina, Javier Milei, de no enviar embajador a Nicaragua en medio de la violación a los derechos humanos del pueblo nicaragüense y ante la falta de democracia bajo la administración de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

Recientemente, el gobierno de Milei afirmó que no enviaría un embajador a las dictadura de Cuba, Venezuela y Nicaragua, como parte de la nueva política exterior de Argentina que pone fin al Kirchnerismo que apoyaba a estos regímenes. Esta medida ha sido aplaudida por la comunidad de opositores nicaragüenses quienes consideran necesario aislar política y económicamente a Ortega y Murillo.

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Maradiaga se unió a las felicitaciones a Milei y dijo que el presidente argentino es claro en “adoptar medidas firmes frente a dictaduras en América Latina”, pues se propone “no solo cambiar el rumbo político en Argentina, como ya lo ha logrado con éxito, sino también influir de manera significativa en la política latinoamericana y liderar una postura más enérgica contra los regímenes de Díaz Canel en Cuba, Daniel Ortega en Nicaragua y Maduro en Venezuela”.

“Su decisión de no nombrar embajadores en Venezuela, Nicaragua y Cuba es coherente con la nueva política exterior de Argentina, que busca ser más firme frente a las autocracias que representan una amenaza para la libertad individual (…) creo que las dictaduras no merecen una respuesta tibia, como la que hasta ahora han recibido”, expresó Maradiaga.

Argentina, un nuevo aliado de la democracia para Nicaragua

Según el opositor desterrado a Estados Unidos, la nueva política exterior de Milei arrastra consecuencias para los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua, pues a su criterio Argentina envía “un mensaje político claro a nivel regional” que motivaría a otros países a “adoptar una postura similar frente a los regímenes mencionados”.

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Además que, en este caso, Nicaragua ganaría un nuevo aliado en la defensa de los derechos humanos y un enemigo de los regímenes anti-democrático, sobre todo, en espacios de denuncia internacional como son las Naciones Unidas (ONU) y la Organización de los Estados Americanos (OEA). Hasta noviembre pasado, Argentina bajo el Kirchnerismo era un aliado de Ortega y Murillo.

“Esta medida marca un cambio en la posición de Argentina en foros internacionales como la ONU, la OEA y organismos financieros internacionales, donde el país tiene influencia. Se espera que Argentina abogue de manera más contundente por la democracia y los derechos humanos en la región”, agrega Maradiaga.

“Esta decisión contribuirá a aislar políticamente a los regímenes de Cuba, Nicaragua y Venezuela”, añade.

Milei busca “presionar a los regímenes”

Finalmente, Maradiaga señala que el presidente Milei presenta su “compromiso con una política exterior más firme y coherente con los valores democráticos”, además que busca contribuir “a cambiar la dinámica diplomática en la región y a presionar a los regímenes autoritarios” de Nicaragua, Cuba y Venezuela, las cuales hasta ahora han recibido aplausos del gobierno saliente de Argentina.

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“Con su decisión manda un mensaje claro de que es hora de poner fin a la diplomacia de la ambigüedad frente a las dictaduras”, concluye.