Año escolar 2024 inicia con “chantajes” a maestros, denuncia profesor Putoy

Para el reconocido profesor Gabriel Putoy, de la Unidad Sindical Magisterial y exiliado en Costa Rica, el inicio escolar 2024 en Nicaragua se ha convertido en una especie de “homenaje” a los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, bajo fuertes “chantajes” de despidos inmediatos de aquellos maestros que no reciban y acaten las ordenes de sus superiores, a pesar de la falta de condiciones en los colegios.

Putoy señaló que este 29 de enero se aperturó el inicio del ciclo educativo 2024 en Nicaragua bajo un fuerte control partidario del régimen sandinista. Criticó la instalación de banderas rojinegras durante el acto de apertura en Managua como un símbolo del adoctrinamiento político en los colegios públicos del país, pero sobre todo, el “chantaje” de directores que amenazan con despidos en medio de deserciones de maestros.

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“Cómo brillan esos símbolos que son repudiados por la población estudiantil y la población en general. Aquí el problema es que los pobres docentes no tienen otra opción (…) que hacer lo que les manden sus superiores”, expresó en referencia a las ordenes que bajan los directores para que en las aulas de clases hayan símbolos políticos del FSLN.

“Si el superior dice que hay que usar ese lenguaje y esos símbolos partidarios, lo hacen, porque sino serán despedidos, no hay otra forma de que los pobres se enfrenten a la presión del gobierno, de manera que esa es la realidad” en los colegios, agregó.

Sin condiciones en las aulas de clases

El maestro nicaragüense exiliado desde 2018 por amenazas en su contra, también señaló sobre la falta de condiciones en los colegios públicos. A su criterio, este año inicia el ciclo escolar con daños en la infraestructura de las aulas, sobre todo en las zonas rurales.

Además, afirmó que hay colegios donde los inodoros se encuentran colapsados, lo cual representan una alerta para el sistema de educación público que también registra una alza en la matricula escolar.

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“El año pasado los profesores a través de ANDEN hicieron eco en decir que si podían aumentar el número de inodoros dado que la cantidad de estudiantes por escuelas ha aumentado, entonces el número de estudiantes por servicios higienicos colapsan y es parte de la insalubridad”, detalló.

Asimismo, se refirió a las condiciones de los estudiantes en las aulas, pues la Ley de Carrera Docente indica que en cada salón debe haber un promedio de 45 alumnos, pero en Nicaragua la realidad es otra. Debido a la demanda de estudiantes, los colegios han aperturado con una sobre población de hasta 60 alumnos en cada salón.

“Ese es el gobierno que habla de una educación inclusiva cuando la realidad es que ni siquiera se le da una educación aceptable”, denunció.

Merienda Escolar es una sobrecarga para los padres

Por otro lado, el profesor Putoy afirmó que el programa de Merienda Escolar se ha convertido en un gasto extra para los padres de los alumnos en medio del alto costo de vida de las familias nicaragüenses, en vez de ser un beneficio para aquellas familias que viven en condición de pobreza.

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“Iniciamos también una Merienda Escolar paupérrima, esa Merienda Escolar no cubre ni el 50% de los estudiantes que asisten a una aula de clases de primaria.  Los padres de familia tiene que cubrir de su paupérrimo salario el otro 50%, porque lo que te dan es una libra de frijoles, dos de arroz (y) una cuarta de aceite para darle de comer a 50 y 60 niños”, finalizó.