Uruguay en OEA: Hay que cambiar el estilo prepotente y criminal del régimen de Ortega

El representante de Uruguay en la Organización de Estados Americanos (OEA), Washington Abdala, consideró de importancia el abordaje que esta entidad hizo este viernes, en sesión especial, sobre el tema de la ocupación ilegal de la sede de este organismo en Managua, lo cual tiene una referencia directa al principio de inviolabilidad del espacio diplomático.

No obstante, Abdala recalcó que en realidad hay algo mucho más importante que hace referencia a la trágica situación que vive el pueblo nicaragüense, víctima de la que calificó como una “dictadura horrorosa, horrible”.

Para el uruguayo en lo que debe insistirse en la OEA, es en denunciar y procurar cambiar con algún método, el estilo “prepotente y criminal” del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

“Ya no se sabe la cantidad de muertos que hay en Nicaragua, no hablamos de diez ni de cincuenta, hablamos de cientos”, dijo Abdala en referencia a las víctimas de la represión de Ortega a raíz del 18 de abril del 2018.

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El rol de la OEA, en su forma militante de proceder, no debería limitarse a sólo eso- agrega Abdala – a pesar de tener “lecturas distintas y miradas diversas” sobre el caso de Nicaragua, se debe priorizar la existencia de democracia como un dato real y concreto en cualquier país, particularmente en Nicaragua.

Con la aprobación de 29 votos este viernes, de una resolución que rechaza la ocupación ilegal de la sede de la OEA en Managua por parte del Gobierno de Ortega, los 29 países están coincidentes en que un régimen como el nicaragüense, “una dictadura oprobiosa, ominosa”, tiene que ser criticada, califica Abdala.

“Eso es lo más importante, eso es lo que está en el fondo del asunto”, advierte el uruguayo.

Nicaragüenses desesperados 

El diplomático afirma que mucha gente del pueblo nicaragüense esta desesperada porque haya alguna línea de solución de entendimiento y lo que están mirando es cuánto tiempo más van a soportar a ese régimen dictatorial y van a vivir con violación a sus derechos humanos, con inexistencia del Estado de Derecho y con cero justicia.

“Pregúntele usted a un venezolano si este no es un tema sustancial, pregúntele usted a un cubano si este no es un tema sustancial, si la defensa de la libertad de los derechos de los derechos humanos, del Estado de Derecho, de la separación de poderes, a ver que le dicen…le van a decir que están desesperados”, expresó.

La actitud de la OEA frente a las acciones del régimen orteguista debe ser como una batalla por el bien, por la dignidad, por el respeto moral, ante Ortega que es la prepotencia persé, agrega el diplomático.

Ortega le “pegó un tiro” a la sede de la OEA

Para Abdala, el “pegarle un tiro” a una sede diplomática, borrarla, “pegarle un cachetazo” es una señal de prepotencia máxima que caracteriza a Daniel Ortega y su gobierno, es una muestra de que hace lo que se le antoja.

“Haríamos muy mal nosotros como organismo en ignorar un evento de esa magnitud”, advirtió, al mismo tiempo que lamentó que hayan existido innumerables instancias de oportunidades en la OEA para con Nicaragua, para generar un ambiente de soluciones, pero que el régimen de Ortega no haya tomado ninguna.

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En sus palabras finales durante su intervención, Abdala subrayó que no se está tratando con personas que hablan y dialogan, respetuosas de los derechos humanos y de la vida, sino con gente que se maneja con otros códigos y que violenta lo más sagrado que tiene una sociedad que es el derecho a la vida.

“En nicaragua no hay respeto por el derecho a la vida, tengámoslo claro…y si no defendemos eso nosotros, no sé cuál es nuestra función. El grito que pega hoy el Consejo Permanente es el reclamo por el respeto a la vida de todos los nicaragüenses”, concluyó el diplomático.