Joven nicaragüense fallece en hospital de Chicago EE.UU.
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El compatriota Ismael Alexander Hernández Ramos, falleció el pasado 7 de febrero en un hospital de Illinois, en Chicago, Estados Unidos, después de haber estado internado durante un mes.
Hernández Ramos era oriundo de Poza Azul, en Wamblán, Jinotega, al norte de Nicaragua y la noticia de su muerte fue confirmada por la organización Texas Nicaraguan Community (TNC).
Se desconocen las causas de su fallecimiento y las circunstancias que llevaron al connacional, a su hospitalización, las mismas no han sido reveladas por las autoridades de ese país.
La familia del joven, hizo un llamado a la solidaridad de todas aquellas personas, de buen corazón que deseen apoyarlos en estos momentos difíciles.
Lo recaudado será destinado en los gastos de repatriación del nicaragüense, para que pueda ser llevado a su tierra natal, y que sus seres queridos le den el último adiós, para esto han destinado la siguiente cuenta bancaria a través de cuentas bancarias.
BANPRO 199384615639, con número de ruta 071904779, o bien enviar su contribución por ZELLE al número de teléfono 708731-9801.
Tres pinoleros muertos en febrero
La última persona fallecida lejos de su patria es el joven Ismael Alexander Hernández Ramos. A la lista se agrega al nicaragüenses Héctor Hinginio Jarquín quien perdió la vida tras sufrir un accidente de tráfico en Tampa, Florida, el pasado viernes 2 de febrero.
El joven oriundo de Esquipulas, Matagalpa, al momento del suceso se dirigía a su trabajo en motocicleta, donde sufrió el accidente de tránsito.
Jarquín, quedó hospitalizado con muerte cerebral y en estado de salud crítico. A pesar de los esfuerzos médicos, lamentablemente falleció. El nica deja a su hija de 3 años en orfandad.
Otro caso registrado es el de Yamileth Patricia Gutiérrez, de 39 años, falleció el 4 de febrero, a causa de un paro cardíaco horas después de ingresar a un hospital en Dallas, Texas, Estados Unidos.
La mujer tenía 14 meses de haber llegado a ese país, en busca de mejorar su situación económica pero lamentablemente lo que encontró fue la muerte. La nicaragüense deja en la orfandad a dos niñas de 7 y 12 años y un varón de 19 años.