Estas son las 5 razones para vencer el miedo y decidirse a comprar en el mercado Oriental
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Durante un sondeo realizado por Nicaragua Actual en varias paradas de buses de Managua, un 50 por ciento de los capitalinos consultados revela que no realizan compras en el mercado Oriental por miedo.
“Es que se oyen tantas cosas de ese mercado, que me da miedo ir allí”, opina la señora Sandra Rivera, quien dice que prefiere ir a los Palí a realizar sus compras semanales para la casa.
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Por su parte, la joven Jenny Ramos dice que jamás va de compras en el mercado oriental porque es un lugar muy sucio, desordenado y que es tan grande, que nunca podría saber dónde encontrar los productos que necesita.
Sin embargo, el economista Juan Carlos Rodríguez, considera que es cuestión de tomar ciertas precauciones, vencer el miedo y decidirse a realizar compras en el mercado oriental.
“Pues en tiempos de inflación y de precios elevados de productos, el mercado oriental se convierte en el lugar por excelencia para comprar la comida, ropa, zapatos, trastes, productos de limpieza y hasta artículos de ferretería y materiales de construcción, todo es quitarse el miedo, tomar algunas precauciones y probar… las familias verán que se ahorra”, asegura Rodríguez.
A continuación, presentamos 5 razones para vencer el miedo y decidirse a comprar en el mercado oriental:
#1.- Ubicación:
El mercado oriental se ubica en el centro norte de la ciudad de Managua, en una posición estratégica porque por ahí circula más del 75% de las rutas del transporte urbano colectivo de la ciudad.
Por el sector de Gancho de Caminos pasan las rutas: MR4, 101, 102, 104, 107, 108, 109, 111, 116, 118, 154, 158, 163, 164, 165, 168, 195 y 262.
En el sector de Enabas y El Calvario, pasan las rutas: 6, 112, 123, 266, 167, 170 y 159. Cerca del sector de El Novillo pasan las rutas: 210, 113, 175, 115, 125 y 172.
Las únicas rutas que no pasan por el mercado oriental son: 103, 105, 106, 110, 114, 117, 119, 120, 169 y 210. Sin embargo, es fácil hacer el transfer hacia otra ruta en los diferentes puntos donde estas se cruzan o intersecan.
En caso de que alguien quiera ir en vehículo también hay áreas de parqueo disponible, que cuestan entre 60 y 80 córdobas.
#2.- Precio:
Comparado con los supermercados La Unión, La Colonia, Palí, y Maxi Palí, Walmart o Pricesmart, cualquier producto es más barato en el mercado Oriental. Una chiltoma por ejemplo, actualmente en cualquier supermercado cuesta entre 10 y 12 córdobas, en cambio en el Oriental se puede encontrar desde 3 por 10 córdobas.
Un pollo entero en el Oriental puede encontrarse hasta en 37 córdobas por libra, mientras que en los supermercados actualmente no se bajan de 47 córdobas por libra.
“Sin duda la mayor ventaja de comprarlos alimentos o cualquier cosa en el Oriental es que podés pedir rebaja y los comerciantes siempre estarán dispuestos a ofrecértela. Pero andá pedile rebaja a los Palí, a la Unión o a La Colonia… ahí el precio que ponen es el que pagás en la caja”, opina el economista Rodríguez.
#3.- Variedad:
El mercado oriental ha crecido tanto, que actualmente se calcula que es el centro de compras más grande Centroamérica, con unas 85 manzanas de extensión. Aquí se puede encontrar de todo. Desde alimentos, ropa, zapatos, electrodomésticos, (cosas nuevas o usadas) de todas las marcas y a diferentes precios
“Aquí la clave está en darte el tiempo necesario para conocer e identificar los diferentes sectores donde podés encontrar lo que buscás. El mercado oriental es un laberinto, pero si te quitás el miedo y te disponés con buena actitud a conocerlo, ya luego es cuestión de acostumbrarte y saber que tal día irás a comprar comida y ya sabrás a donde ir. Otro día a comprar ropa y ya sabrás dónde moverte y así sucesivamente”, recomienda la señora Nidia Cantón.
#4.- Apoyar a familias más necesitadas:
Si bien la dictadura ha invadido todos los rincones del país con su propaganda de culto a la pareja dictatorial, y los mercados tampoco se escapan a la manipulación política, para la gran mayoría de los comerciantes su ideología es simplemente “vender”.
Incluso hay un lema entre los comerciantes que se puede resumir en lo siguiente: “Aquí si no trabajamos no comemos, nadie nos regala nada. Las ideologías aquí salen sobrando. Y si nos alineamos es para no perder la oportunidad de vender y poder mantener a nuestras familias”, así lo explica una vendedora de productos plásticos con más de 30 años de vender en el Oriental.
“Al comprar en el mercado oriental estás beneficiando a miles de familias humildes nicaragüenses que día a día acuden a vender allí, y no estás haciendo más ricos a los dueños de los Palí que son de Costa Rica o a la familia Mántica que son los dueños de La Colonia, ni estás haciendo más rico a Humberto Ortega, el hermanito del dictador que es socio principal de supermercados La Unión y quien trajo a Walmart a Nicaragua”, argumenta el economista.
#5.- Sirve de terapia y de termómetro de la economía:
Finalmente visitar el mercado oriental es como tomarle el pulso a la economía del país y puede resultar hasta terapéutico según la psicóloga Vilma Escalante.
Según Escalante, “al visitar el Oriental te das cuenta de cómo está la situación económica del país. Ahí vas a ver cualquier cantidad de rostros reales, sin maquillajes, sin sus mejores trajes, vas a encontrar gente sincera, que te dice lo que piensa una vez que te ganás su confianza”, opina la psicóloga.
“En estos tiempos en que nuestros hijos se enrumban hacia economías más digitales, en las que hacen sus compras por Facebook o cualquier otra red social, visitar el mercado oriental es un encuentro con la realidad, es ver el esfuerzo de miles de familias reunidas en un solo punto, luchando por subsistir cada día… sin duda al salir de ahí, de alguna manera tus cargas que parecían las peores, terminan por quedar bastante aliviadas”, opina la psicóloga.
Entre las recomendaciones que deben tomarse en cuenta para ir de compras al mercado Oriental están:
— Ir sin teléfono celular, sin reloj y sin prendas de oro o fantasía que llamen la atención.
— Ir sin cartera, bolso o billetera.
— Portar el dinero en la bolsa del pantalón o bolsa de la falda y llevar la cantidad necesaria para la compra a realizar.
— Si es primera vez, es buena idea ir con otra persona que ya conozca.
— Ir vestido de manera casual.