Dictadura de Nicaragua oficializa a paramilitares como “policías voluntarios”

Daniel Ortega y Rosario Murillo en su reforma Constitucional pretenden legalizar a los paramilitares bajo figura de “policías voluntarios”, mismos que fueron ocupados por la Policía y el Ejército Sandinista para reprimir a jóvenes estudiantes durante las protestas antigubernamentales en 2018.

En el Artículo 97 en el proyecto de reformas, establece que “se crea la Policía Voluntaria como cuerpo auxiliar y de apoyo a la Policía Nacional, integrada por ciudadanos y ciudadanas nicaragüenses que prestan sus servicios de forma voluntaria”.

Aclaran que “no pueden existir más cuerpos armados en el territorio nacional que los establecidos en la Constitución, ni grados militares que los establecidos por la ley”.

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Cabe mencionar que los que integran los supuestos “policías voluntarios”, son funcionarios o trabajadores de las distintas alcaldías del país, los llamados CPC (Consejos del Poder Ciudadano), militantes sandinistas y exguerrilleros de los años 80 que participaron en las protestas como “paramilitares”.

Estos desde el 2018, forman parte de la estructura represiva y de vigilancia política del Frente Sandinista en los barrios― acompañando a agentes policiales para identificar, perseguir y encarcelar a jóvenes que participaron en las protestas o que consideren que es opositor al régimen.

Este modelo policial se organiza desde las personas, familias y comunidades con la coordinación, articulación y comunicación con los secretarios políticos y tendido electoral para supuestamente “contribuir a la paz, estabilidad y la seguridad” en el país.

Luego de participar en la masacre de estudiantes, miles de militantes sandinistas en todo el país realizan vigilancia solapada. El protocolo de actuación es de espionaje, en el que informan a la Policía y los oficiales actuaban realizando allanamientos y acoso a los opositores a plena luz del día y a cara descubierta.

Los “policías voluntarios, también son llamados por la institución armada para cotejar listas de críticos y así busquen información sobre si los miembros de esa familia se encuentran o no en el país, o las actividades a las que se dedican a diario.

Roberto samcam asegura que “lo que están haciendo es darle una categoría oficial” a los paramilitares

Para Roberto Samcam, mayor en retiro del Ejército de Nicaragua, asegura que la figura de “policía voluntaria” aparecía en la Ley de la Policía pero bajo condiciones de “apoyo”, es decir, no tenían ningún rango, no pueden estar armados ni participar en operaciones, pero con la nueva reforma a la Constitución, la dictadura sandinista lo que está haciendo es darle una “categoría oficial” a los Paramilitares.

Con esta nueva disposición, lo que está haciendo Ortega con los paramilitares o “policías voluntarios” es que oficialmente formen parte de la estructura policial para “mantener el control social de la población y estar preparado para lo que les devela como un nuevo levantamiento”.

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Por otro lado, a pesar de la concentración del poder que ha creado el líder sandinista y el reclutamiento de paramilitares que están realizando con esta nueva legalización, la reforma se contradice al establecer que “no habrá servicio militar obligatorio y se prohíbe toda forma de reclutamiento forzoso para integrar el Ejército de Nicaragua, la Policía Nacional y el Ministerio del Interior”, si en la práctica eso es lo que se está haciendo.

Ortega confirmó que “policías voluntarios” son paramilitares

Daniel Ortega, en una entrevista con el medio internacional Euronews en julio de 2018, reveló que los parapolicías encapuchados con armas que actuaron en el marco de las protestas contra su Gobierno “son policías voluntarios”.

“Aquí tenemos lo que se llama policía voluntaria”. “El policía voluntario en operaciones especiales va enmascarado en tiempo normal. Incluso hay países en América Latina en que los jueces van enmascarados para que no los maten”, sostuvo en la entrevista.

Las versiones del dictador sandinista han sido contradictorias, pues luego en otra entrevista con el canal estadounidense Fox, Ortega desmintió controlar estos grupos paramilitares que actúan a favor del gobierno y aseguró que estaban dirigidos por partidos de la oposición.

Luego con la cadena CNN dijo otra versión. Al mostrarle una imagen de un grupo de individuos enmascarados y armados con banderas rojinegras, Ortega dijo que no eran paramilitares sino “ciudadanos defendiéndose” y luego dudo de la veracidad de la fotografía y la atribuyó a un montaje de la “derecha”, a pesar que toda la población los grabó cuando entraban en camionetas a los departamentos más reprimidos para realizar la llamada “Operación limpieza”.

Los encapuchados armados son señalados, al igual que la Policía y el Ejército Sandinista, de ser los principales ejecutores de más de 350 jóvenes asesinados, según diversos organismos internacionales y nacionales, por la crisis nicaragüense desde el 18 de abril, lo cual hasta el momento ha sido negado por el mandatario.