Gran despliegue policial para vigilar la semana Santa

La dictadura de Daniel Ortega a través de la sancionada Policía sandinista lanzó el “Plan de seguridad Verano 2024” para ampliar el control territorial con al menos 17 mil oficiales en las calles durante la Semana Santa que inicia el próximo 24 de marzo con el domingo de ramos.

La institución sancionada reveló que ejecutarán “medidas preventivas” como parte del plan calles para arrestar a conductores que viajan bajo los efectos del alcohol, esto con la finalidad de disminuir el número de accidentes de tránsitos y víctimas fatales.

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El comisionado sandinista Fernando Borge, de la cojefatura de Managua, dijo a los medios oficialistas, que estas medidas incluyen la aplicación rigurosa de pruebas de alcohol, el monitoreo de velocidad mediante radares y la revisión exhaustiva de documentos.

Borge dijo que pretenden evitar tragedias y garantizar la supuesta “paz y seguridad” de los nicaragüense con el despliegue masivo de 17 mil agentes en todos los 153 municipios del país.

No obstante, especialistas como Martha Patricia Molina, investigadora nicaragüense y experta en temas religiosos, cree que este plan incrementará el control y vigilancia de la dictadura de Ortega sobre los sacerdotes y obispos durante la semana santa.

A pesar que el comisionado sandinista prometió reducir los hechos delictivos en todo el país con el despliegue policial, lo cierto es que solo pretenden incrementar el asedio y el hostigamiento en contra de la iglesia católica, como ha ocurrido en años anteriores.

Semana santa intramuros

Este pasado lunes, Molina denunció que la dictadura de Ortega Murillo prohibió 4,800 procesiones de la iglesia católica durante la Cuaresma de 2024, sobre todo para la Semana Santa.

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Confirmó que el régimen sandinista volvió a dar una estocada a la fe católica en Nicaragua al cancelar las procesiones en las calles este año, exhibiendo la falta de libertad de culto en el país como parte de la campaña de desprestigio de la dictadura en contra de la iglesia católica y sus autoridades.

Molina observó que pocas parroquias en el país han realizado procesiones “alrededor de la manzana del templo”, como ha ocurrido en varias iglesias de Masaya, una de las ciudades más atacadas en 2018 por la dictadura sandinista.

Y que para la Semana Santa que se aproxima se espera que las procesiones más emblemáticas de toda la cuaresma se realicen “intramuros” en Nicaragua. Incluso, adelantó que la tradicional procesión de la Sangre de Cristo del Viernes Santo, también queda suspendida al igual que años anteriores.