El nazareno obligado al encierro en los templos de Nicaragua ante prohibición de viacrucis

La iglesia católica en Nicaragua vive el escenario más represivo en la historia reciente. Este viernes 16 de febrero, las parroquias de todo el país celebran el primer viacrucis penitencial de cuaresma bajo represión y destierro de sacerdotes, siendo este el segundo año en que la dictadura de Ortega y Murillo prohíbe las procesiones de Semana Santa.

Las parroquias de la arquidiócesis de Managua, dirigidas por el Cardenal Leopoldo Brenes, ya han confirmado en sus redes sociales que este viernes se lleva a cabo dentro de los templos el primer viacrucis de cuaresma.

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La parroquia San Jerónimo de Masaya, una de las ciudades más atacadas por la dictadura de Ortega desde 2018, publicó en su perfil de facebook que la procesión del viacrucis se llevará a cabo esta tarde “alrededor de los dos parques de nuestro templo parroquial”.

Por su parte, la parroquia San Luis Gonzaga de Managua anunció que el viacrucis será a las 5:30 de la tarde en los predios del templo religioso. Asimismo, celebrará su primer viacrucis la parroquia San José de Tipitapa.

Iglesia católica vive una situación “adversa””

La defensora de derechos humanos e investigadora nicaragüense, Martha Patricia Molina, confirmó en sus redes sociales que la Iglesia católica en Nicaragua celebra el inicio de la cuaresma en medio de interrogatorios, visitas a parroquias y casas curales, y bajo la presencia vigilante de políticos sandinistas.

Desde el destierro de 19 sacerdotes, obispos y seminaristas nicaragüenses a Roma, en enero pasado, la Policía sandinista continúa persiguiendo, hostigando y asediando lo templos para evitar la celebración de actividades religiosas dentro y fuera de los templos.

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Molina denunció que efectivos policiales y miembros de la “Seguridad del Estado” visitan las parroquias y la viviendas donde habitan sacerdotes para tomar fotos y videos de los templos y las misas. “…no se sabe qué buscan pero su actitud es ‘como que buscaran armas o bombas'”, alertó.

“Los presbíteros también están siendo víctimas de amplios interrogatorio en donde se les preguntaba de sus preferencias sexuales, de la cantidad de hombres y mujeres que tienen, entre otras preguntas abusivas”, denunció la abogada.

Cardenal llama al perdón y no a la confrontación

El pasado miércoles de ceniza, el arzobispo de Managua llamó a la feligresía a practicar el perdón como pilar fundamental de la vida y exhortó a no propagar “la confrontación”, sobre todo en este contexto de represión y zozobra que vive el país desde 2018.

Durante su homilía en catedral de Managua, el cardenal Brenes pidió perdonar sin acusar a nadie y tras reconocer que “nos cuesta perdonar”, exhortó a todos a orar para pedir el perdón a Dios. Además para no proponer la “confrontación” en este tiempo de cuaresma, sino que la “misericordia”.

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“Qué hermoso es que hoy también nosotros podamos reconocer nuestros pecados y dejemos aunque sea en este tiempo de acusar a alguien”, indicó.

Desde 2018, Ortega y su esposa, la vicedictadora Rosario Murillo, acusan al clero de “terrorista y golpista” de apoyar los disturbios civiles que, según afirman, equivalen a planear un golpe de Estado en su contra.