Cardenal Brenes llama al perdón y a la no confrontación

En el inicio de la cuaresma, ques es un tiempo de reflexión y conversión que propone cada año la iglesia católica, el arzobispo de Managua, cardenal Leopoldo Brenes, llamó a la feligresía a practicar el perdón como pilar fundamental de la vida y exhortó a no propagar “la confrontación”, sobre todo en este contexto de represión y zozobra que vive el país desde 2018.

Durante su homilía de este miércoles de ceniza en catedral de Managua, el cardenal Brenes inició refiriéndose a las 117 parroquias de la arquidiócesis, entre las que se encuentran iglesias administradas por sacerdotes desterrados al Vaticano en enero pasado por la dictadura sandinista, y aseguró que cada una de ellas ya están siendo atendidas por sacerdotes que “se han multiplicado”.

LEA TAMBIÉN: La relación entre la Iglesia católica y el gobierno de Nicaragua está en su peor momento ¿Cómo llegó ahí?

“Cantidad de personas que se ha acercado para recibir este signo hoy de la ceniza que implica nuestra vulnerabilidad”, dijo el jerarca católico. “Tiempo de cuaresma, un tiempo de conversión y conversión significa cambio de dirección”, agregó.

Llama a predicar la reconciliación

En el contexto de represión y asedio que viven las autoridades de la iglesia católica nicaragüense, este miércoles pidió perdonar sin acusar a nadie y tras reconocer que “nos cuesta perdonar”, exhortó a todos a orar para pedir el perdón a Dios. Además para no proponer la “confrontación” en este tiempo de cuaresma, sino que la “misericordia”.

“Los invito a que podamos compartir con otros la grandeza del amor y la misericordia del Señor, como nos pide el Apóstol Pablo que seamos enviados misioneros de misericordia. Sí, nos cuesta perdonar, nos cuesta perdonar, porque el perdón es divino y se lo vamos a pedir al Señor”, expresó Brenes.

“Mandemos imágenes de reconciliación, de perdón, imágenes en las que no se proponga la confrontación, sino el perdón y el amor”, añadió.

LEA TAMBIÉN: Inicia cuaresma con el sabor de la tradicional sopa de queso, un suculento platillo nicaragüense

El cardenal explicó que las principales enseñanzas de la cuaresma son; el ayuno, la limosna y el perdón. Por ello, reiteró su pedido a la feligresía de actuar “como enviados de Cristo” y que “en el nombre de Cristo prediquen la reconciliación, la fraternidad (y) la misericordia”.

“Qué hermoso es que hoy también nosotros podamos reconocer nuestros pecados y dejemos aunque sea en este tiempo de acusar a alguien”, finalizó.

Rupturas entre la iglesia y el régimen sandinista

La situación del clero y de los fieles católicos en Nicaragua empeora en 2024 luego que diecinueve sacerdotes fueran expulsados del país, se registraran decenas de incidentes de acoso y profanaciones de iglesias en todo el territorio.

El miedo a la represión en curso por parte del dictador Daniel Ortega, contra la Iglesia católica en particular, pero sin escatimar a los evangélicos, se ha vuelto tan generalizado que silencia las críticas al gobierno autoritario e incluso las menciones a la represión desde el púlpito.

LEA TAMBIÉN: “Inútil querer ser dioses” dice Monseñor Báez a los dictadores

La abogada y experta en temas religiosos, la nicaragüenses Martha Patricia Molina, contó 30 profanaciones de iglesias en el último año, de las cuales sólo unas cuantas fueron denunciadas a las autoridades. Recientemente, supo de un sacerdote que acudió a la policía tras un robo en su iglesia, solo para recibir insultos y que le dijeran que él era sospechoso.

Desde 2018, Ortega y su esposa, la vicedictadora Rosario Murillo, acusan al clero de “terrorista y golpista” de apoyar los disturbios civiles que, según afirman, equivalen a planear un golpe de Estado en su contra.