Dictadura de Nicaragua niega entrada al país a otro sacerdote católico

La dictadura de Daniel Ortega a través del Ministerio del Interior (Mint), este viernes prohibió el ingreso al país arbitrariamente a otro sacerdote católico, así lo confirmó la investigadora nicaragüense y experta en temas religiosos, Martha Patricia Molina.

Mediante una publicación en X, Molina informó que el régimen sandinista le negó la entrada a Nicaragua a un sacerdote católico, luego que la aerolínea le notificara que no podría abordar su vuelo, como ha ocurrido con más de dos centenares de religiosos y laicos, en su mayoría opositores, a quienes se les ha prohibido el retorno al país.

LEA TAMBIÉN: EEUU condena reforma a la Constitución y asegura se busca más poder para Ortega

“Dictadura sandinista prohíbe entrada a otro cura nicaragüense. Fue notificado por la línea aérea”, escribió la experta sin brindar detalles del religioso por temor a represalias.

Según Molina, el sacerdote de origen nicaragüense se disponía a regresar a su país desde Estados Unidos cuando le fue notificado que no podría viajar y que debía avocarse con el consulado nicaragüense más cercano para cualquier información. Ella logró reunirse con el religioso y acordaron no revelar su identidad para protegerlo, al igual que a su familia.

De acuerdo a información confirmada por Despacho 505, el sacerdote había revelado a Molina que en Nicaragua recibía acoso y asedio por agente pro gobierno y que en varias ocasiones había acudido a citas e interrogatorios policiales, como parte de la persecución contra las autoridades eclesiásticas nicaragüenses.

Otro sacerdote al exilio

A inicios de mes, Molina informó que la dictadura arreció las prohibiciones contra la libertad religiosa en Nicaragua y la iglesia católica al negar la entrada a los hospitales a los sacerdotes para llevar los santos óleos a pacientes gravemente enfermos o en riesgo de muerte.

LEA TAMBIÉN: Dictadura de Nicaragua ha refundado un nuevo Estado con reformas constitucionales

Asimismo, confirmó que otro sacerdote fue obligado al exilio en medio de la persecución del régimen sandinista a través de la Policía sandinista, el brazo represor de los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo.

Según Molina, el religioso decidió irse del país ante el acoso que recibía por parte de agentes del régimen sandinista.