Aliados y miembros de las JRV sandinistas garantizarán fraude de la dictadura, asegura la Unab

Este 14 de octubre es la fecha tope para que el Consejo Supremo Electoral nombre a los integrantes de las 13,459 Juntas Receptoras de Votos, habilitadas en el proceso electoral de noviembre próximo, en total son 80 mil 754 personas, las que el órgano electoral de corriente sandinista, debe organizar entre sus simpatizantes y aliados.

La actividad en mención, sumada a las que viene llevando a cabo el CSE, no cuenta con el reconocimiento de los opositores y votantes en general; los miembros de las JRV que serán juramentados el 31 de octubre se constituyen: presidente de mesa, el primer miembro, segundo miembro y los fiscales de cada partido político que participan en el denominado “circo electoral”.

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“El FSLN tiene un tendido amigo con el que suelen completar los vacíos de los partidos que se presentan durante los períodos de votaciones, para acceder a fondos públicos, escaños y prebendas que el régimen les brinda… estos fiscales, en su mayoría, son operadores del régimen que, a nivel nacional, se van a encargar de consolidar este fraude”, denunció Alexa Zamora durante una entrevista en Nicaragua Actual.

 

Según el Consejo Supremo Electoral, entre las funciones que tendrán los miembros de las Juntas Receptoras, está el garantizar el respeto y el conteo de los votos, una aseveración que carece de realismo, de acuerdo a Zamora, quien señala que estos “cumplirán las directrices físicas del fraude.

“Esto va desde cuáles deben ser los resultados, cómo se deben de manejar las mesas de votación e, incluso, estar en contacto con los elementos parapoliciales para evitar que la población pueda manifestarse”, comentó.

La representante de la Unab explicó que el ciudadano que se presente y ejerza su derecho de votar nulo, será utilizado para aumentar los números a favor del partido de gobierno, razón por la cual llamó a los empleados públicos, obligados a votar por la dictadura para conservar sus empleos, a denunciar los abusos y anomalías de “manera confidencial”.

La Unidad Nacional Azul y Blanco, Unab, mantiene e incentiva el llamado al paro electoral este 7 de noviembre, debido a que “el régimen le ha cercenado a los nicaragüenses el derecho de elegir y ser elegido” por ello, recomienda ejercer su derecho de no legitimar las elecciones mediante la abstención y la no asistencia a los centros de votación.

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