Comisión de la verdad en Nicaragua fue un proceso apresurado dice sociólogo peruano

La creación de una Comisión de la Verdad tras los conflictos armados, caídas de regímenes dictatoriales o luego que algunos Estados cometieran delitos de lesa humanidad, ha sido indispensable en los procesos transicionales de justicia dentro de un Estado Nación.

Según explicó en conferencia de prensa, organizada por el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, el sociólogo peruano, Eduardo González, el pasado 20 de noviembre; las comisiones de la verdad son organismos de investigación no judicial de graves violaciones a los derechos humanos.

Dichos organismos son de orden oficial, creados por el Estado que deben tener credibilidad en los procesos de justicia y democracia, a partir de un previo proceso de consulta, realizado por distintos sectores de la sociedad y, posteriormente, conformarse por estas últimas esferas.

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Así mismo, el sociólogo destacó que, en el caso de Nicaragua, la comisión hecha por el Estado no posee un poco credibilidad ya que no cumple con los requisitos previos a su conformación.

“La creación de la Comisión de la Verdad debe de ser un proceso reposado, consultado y discutido ampliamente, no ha debido ser en el caso de Nicaragua, un proceso apresurado hecho entre gallos y medianoche, con un mandato legal apurado e incompleto que se aprueba en una sesión del Poder Legislativo, en medio de un fin de semana”, argumentó González a la prensa independiente.

Ortega buscó sofocar demanda de justicia sin éxito

Juan Diego Barberena, miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), aseguró que Ortega, tras el levantamiento cívico y los asesinatos sistemáticos cometidos por la Policía, paramilitares y el Ejército, el FSLN buscó sofocar la demanda de justicia con una ilegítima “Comisión de la Verdad”, hecha a la medida de la dictadura, para otorgar impunidad a los victimarios; a esta se le denominó “La Comisión Porras”, en alusión al diputado orteguista, Gustavo Porras.

“Esa comisión no tuvo ni la más mínima intención de informar que en Nicaragua se estaban violando los derechos humanos”, dijo Barberena.

La comisión se deberá crear tras período de cambio en democracia

Por otro lado, la abogada y miembro de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), María Asunción Moreno, dijo en exclusiva a Nicaragua Actual, que después de los hechos ocurridos en 2018 y el asesinato de más de 300 nicaragüenses, se deberá analizar cuidadosamente sobre qué modelo es aplicable en el país por las experiencias de violencia cíclica que se ha experimentado a través de generaciones.

“Es importante tener claro que las comisiones de la verdad normalmente se han creado durante períodos de cambio político, como el fin de un régimen autoritario. El compromiso de fundar una comisión de la verdad generalmente se incluye en procesos de negociaciones de transición a la democracia y, en algunos casos, como una nueva cláusula en la Constitución”, detalló Moreno.

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La Comisión de la Verdad, Justicia y Paz (Comisión Porras) fue juramentada el seis de mayo del 2018 y está conformada por Cairo Amador, Adolfo Jarquín Ortel, Jaime López Lowery, Myrna Kai Cunningham Kain y Uriel Molina Oliú, quienes, en su mayoría, simpatizan con el partido que mantiene secuestrado el poder o mantienen relaciones estrechas con las cúpulas del FSLN.