Familiares temen mostrar fotografías de los presos políticos a sus hijos e hijas

Mediante una conferencia de prensa los familiares de las personas presas políticas afirmaron que no le han mostrado a sus hijos e hijas las fotografías de sus padres secuestrados en el Chipote para evitar “problemas psicológicos” por las condiciones en que fueron llevados ante un juez días anteriores.

César Dubois, esposo de la rea de conciencia Suyen Barahona, presidenta de la organización política de izquierda Unamos, antes MRS, dijo que aún no mostrado la foto de Suyen a su pequeño hijo, pues teme que la reacción del menor sea inesperada; por ello demandó que “las fotos no son suficientes”, y exige que su hijo pueda comunicarse con su progenitora a través de una llamada.

Mercedes Mendoza, hermana del cronista deportivo Miguel Mendoza, sostuvo que su sobrina Alejandra Mendoza Pozo, de 8 años de edad, no ha visto las fotografías de su padre, puestos que su madre, Margin Pozo, teme que la menor desarrolle “problemas psicológicos” al presentarles las imágenes divulgadas por los medios sandinistas.

“La niña vive desesperada pensando en su papá, escribiéndole versos, cartas”, dijo.

LEA TAMBIÉN: Juventud exiliada en Costa Rica exige a Ortega que muestre a jóvenes presos políticos

Otros sí vieron a sus padres

Por su parte, Bertha Valle esposa del politólogo Félix Maradiaga, desde el exilio dijo que su hija Alejandra pudo ver las fotos de su padre luego de más de 14 meses sin saber nada de él. Valle narró que la reacción de la niña fue inesperada, pues no lloró como lo hacía en ocasiones anteriores.

Valle manifestó que este comportamiento de su hija es resultado de constantes terapias psicológicas y psiquiátricas, así como medicación especial, a las que fue sometida la menor tras el secuestro de su padre en 2021.

Fernanda, esposa del abogado Roger Reyes, aseguró que sus dos hijas, de 3 y 5 años de edad, respectivamente, sí vieron a su padre y su primer reacción fue de alegría, entusiasmo al apreciar a su progenitor luego de más de un año de secuestro. “Dijeron ‘papi’, y sus rostros se les iluminó”, reveló Fernanda.

Asimismo, la hija del periodista y empresario Juan Lorenzo Holman, Renata, narró que su primer impresión al ver el cambio físico de su padre fue llorar; “lloré como una niña”, recuerda. No obstante, al admirar la fortaleza del preso político -a pesar de su excesiva pérdida de peso y desgaste físico- se llenó de orgullo y alegría.

Denuncian grave deterioro físico de las personas reas de conciencia

Los familiares de las personas presas políticas manifestaron además que luego de tres días consecutivos en que el régimen de Daniel Ortega presentó mediante la propagandista sandinista a los reos de conciencia, se confirma la excesiva pérdida de peso, la palidez extrema y el estado de deterioro generalizado que sufren los acusados por razones políticas en Nicaragua.

Denunciaron que las fotografías divulgadas por los oficiosos medios oficialistas no reflejan “las pésimas condiciones de salud, las enfermedades y dolencias que les aquejan, la falta de atención médica oportuna y adecuada, los efectos del confinamiento solitario y el aislamiento del mundo exterior que nuestros familiares sufren diariamente”.

LEA TAMBIÉN: Hijos de Violeta Granera reaccionan ante deterioro de su madre: “Se encuentra golpeada”

Sin embargo, fue evidente confirmar lo que las familias he denunciado meses anteriores: “la excesiva pérdida de peso, la palidez extrema y el estado de deterioro generalizado que sufren”.

“Que el régimen presente a nuestros familiares denota un intento de deslegitimar las denuncian que estamos haciendo. Las noticias de medios oficialistas intentan contradecir lo que estamos denunciando”, señaló Berta Valle.

En este sentido, los familiares siguen demandando a las autoridades del sistema penitenciario incrementar las raciones de proteínas, vegetales, vitaminas y fibras que les proporcione una alimentación balanceada a sus familiares secuestrado y torturados por más de 450 días en las celdas del “Nuevo Chipote”.

Asimismo, reiteraron el llamado a que se les permitan visitas de forma regularizada, además de videollamadas para que puedan tener mayor comunicación con sus familiares como lo establecen las leyes del país. En el caso de quienes tienen hijos menores de edad, los familiares exigen se les permita la visita de los niños y niñas después de más de 14 meses de no reencontrase con sus progenitores.