“China es un amigo confiable de Nicaragua”, dice Xi Jinping a Ortega al renovar asociación estratégica

El dictador Daniel Ortega sostuvo este pasado 19 de diciembre una llamada telefónica con el presidente de China, Xi Jinping, en ocasión al segundo aniversario del restablecimiento de relaciones diplomáticas, y en la cual el líder sandinista depositó suma confianza en el gigante asiático para lograr recuperar la economía de Nicaragua que aún no logra “levantar cabeza” desde 2018, y renovar sus tratados estratégicos.

Mediante una “Declaración Conjunta”, ambos países gobernados por regímenes socialistas y violatorios de derechos humanos, celebraron el segundo año de relaciones diplomáticas y reafirmaron la voluntad de ambos por continuar estrechando apoyo y cooperación internacional.

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Ortega y Jinping valoraron de “rápido” el intercambio comercial y político entre ambos países en menos de 24 meses, y tildaron de “positiva” la colaboración bilateral en “foros multilaterales” en los que China y Nicaragua se han acuerpado por encima de la defensa a los derechos humanos y para arremeter en contra de los Estados Unidos y Europa.

Nicaragua no reconoce a Taiwán y apoya “una sola China”

Durante la conversación entre ambos mandatarios, Ortega volvió a desconocer al Estado de Taiwán asegurando que su régimen “se opone resueltamente a “la independencia de Taiwan” en todas sus manifestaciones”, y que por ello Nicaragua se compromete a no tener “ningún tipo de contacto oficial con Taiwan” en respaldo absoluto a Jinping.

Cabe señalar, que al cumplirse dos años del restablecimiento de relaciones entre Nicaragua y China, Taiwán sigue destacando por todo el apoyo bilateral y la cooperación internacional que le brindó al pueblo nicaragüense en más de 30 años de relaciones diplomáticas.

Entre las donaciones de Taiwán están una Casa de la Presidencia que ahora se denomina “Casa de los Pueblos”; un moderno estadio de béisbol bautizado como “Estadio Nacional Dennis Martínez” y renombrado “Estadio Soberanía”; y un barrio establecido en tiempo récord, Ciudad Belén, con más de 30 millones de dólares.

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China defiende a dictadura de Nicaragua

En respuesta a Ortega, China “apoya firmemente a Nicaragua a defender la independencia, la soberanía, la autodeterminación la seguridad y los intereses de desarrollo del país”, en referencia a las acusaciones de la comunidad internacional que señalan al régimen sandinista de criminales de lesa humanidad.

Incluso, Jinping dijo que rechaza “categóricamente las injerencias extranjeras en los asuntos internos de Nicaragua”, y que “tiene voluntad de unirse al líder nicaragüense para dar un ejemplo de solidaridad, cooperación, beneficio mutuo y ganancias compartidas”.

“El país asiático está dispuesto a ser un amigo confiable de Nicaragua, seguirá apoyando firmemente al país centroamericano en la salvaguarda de su independencia y dignidad nacionales, y también respalda a Nicaragua en su rechazo a la interferencia externa”, dijo Jinping.

TLC entre China y Nicaragua

Por otro lado, ambos mandatarios destacaron la importancia del Tratado de Libre Comercio entre Nicaragua y China (TLC), mismo que entrará en vigor el 1 de enero del próximo año. En el caso de Nicaragua, ya ha sido notoria la inversión de empresarios chinos en suelo nicaragüense con la instalación de tiendas, e incluso, un centro de compras donde se comercializa más de 10 mil productos proveniente del gigante asiático.

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Por su parte, China dijo que “es un logro histórico la cooperación entre los dos países, señalando que ambas partes deben aprovechar esta oportunidad para aumentar continuamente el volumen y el nivel del comercio bilateral”.

“La parte china saluda la entrada de más productos típicos nicaragüenses en el mercado chino. La parte nicaragüense está dispuesta a ampliar sus exportaciones a China mediante plataformas como la Exposición Internacional de Importaciones de China”, reza la Declaración Conjunta.

Van contra la ONU

Finalmente, Jinping y Ortega coincidieron en que deben ampliar los “intereses comunes”, así como las posiciones y propuestas parecidas en los asuntos internacionales, con la finalidad de acuerparse como regímenes socialistas y en contra de las Naciones Unidas (ONU), misma a la que la dictadura sandinista acusa de “servir bajo los intereses imperialistas” de los Estados Unidos.

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“Se apoyarán aún más en los asuntos internacionales para defender el sistema internacional centrado en la ONU, el orden internacional sustentado en el derecho internacional y las normas básicas de las relaciones internacionales”, finaliza.