Lula no defenderá, ni visitará a Ortega, lo considera un dictador, asegura canciller brasileño

La relación del nuevo Gobierno de Brasil con la dictadura de Nicaragua se mantendrá en los límites de la diplomacia, ha dejado en claro el nuevo ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, embajador Mauro Vieira en declaraciones sobre la política exterior de la recién instalada administración presidencial de Luiz Inacio Lula da Silva.

En una entrevista que concedió al diario argentino El Clarín, el funcionario se refirió a la crisis sociopolítica en Nicaragua y aseguró que el presidente Lula considera dictador a Daniel Ortega: “Lula declaró muchas veces y es público, no soy indiscreto, que cuando estaba por terminar su segundo mandato había un apoyo fuerte para una reforma que le diera otro mandato. Se opuso sosteniendo que las democracias presuponen alternancia y lo contrario es dictadura. Él lo tiene muy claro”, manifestó.

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¿Entonces, Brasil se propone presentarse en todos esos foros para sostener ese argumento?, preguntó el periodista. El canciller contestó afirmativamente, «pero también sin dejar de aproximarnos a los países con los que se tiene afinidades y con los que no las hay y en cambio se mantienen discrepancias, se buscarán soluciones que generen cambios positivos, porque de eso se trata la diplomacia. Es el arte de la negociación, de la conversación. Si no se conversa, si se le da la espalda al otro, no hay diplomacia y por lo tanto tampoco hay soluciones», explicó.

Bajo esa lógica, el jefe de Exteriores de Brasil dijo que la administración de Lula ha apostado por reactivar las relaciones diplomáticas con Venezuela y normaliza los vínculos son Cuba y Nicaragua. «Nos importa el diálogo”, remarcó.

Asimismo, Vieira recordó que su país ha censurado las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua en los foros regionales y multilaterales como las Naciones Unidas y en la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra.

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Insistió en que Brasil trabajará en la promoción del diálogo y la diplomacia. Manifestó que su país no cree que la solución «sea la de aislar a un país o las sanciones. Eso es peor, se debe seguir negociando y dialogando porque lo más grave le sucede a la gente que está al final de la línea y son las primeras víctimas. Creo que el diálogo es fundamental”.

LULA NO ABOGARÁ POR ORTEGA

En otra entrevista, esta vez con el medio brasileño Estadao, el diplomático dijo que Lula no pronunciará un discurso en defensa del régimen de Daniel Ortega, ni tiene prevista una visita oficial en el contexto de crisis democrática que atraviesa Nicaragua.

“Les aseguro que Lula no va a hacer una visita de Estado a Nicaragua en esta situación. Creo que eso es suficiente», sostuvo el canciller, al tiempo que señaló que en Nicaragua quien se declara candidato a la presidencia es arrestado.

Diplomático de carrera por cerca de 50 años y con una amplia experiencia en Comercio Exterior, Vieira ha ocupado los cargos más importantes en las legaciones de Brasil en el exterior: fue embajador en Estados Unidos (2010-2015), en Argentina (2004-2010) y representante permanente de Brasil ante la ONU (2016-2019).

Esta es la segunda vez que Vieira asume como canciller tras comandar las Relaciones Exteriores durante el Gobierno de Dilma Rousseff (2011-2016), destituida por un juicio político.