Álvarez: “No se puede vivir descartando al adversario porque entonces se militariza la política”

Monseñor Rolando Álvarez, Obispo de la Diócesis de Matagalpa, al culminar su homilía correspondiente a este domingo (06-06-21), habló sobre el contexto político-social que atraviesa Nicaragua, a cinco meses de llevarse a cabo las elecciones presidenciales bajo nulas garantías de transparencia y competitividad; el panorama muestra un incremento de la represión, inhibiciones, acusaciones penales y censura total a los medios de comunicación independientes.

“Nicaragua vive serios y complejos conflictos, necesitamos urgentemente cauces para resolverlos, no se puede vivir excluyendo al otro, censurando y descartando al adversario, porque entonces se militariza la política y se le despoja de su verdadero sentido que es la búsqueda del bien común y ponemos al país al borde de una dinámica devastadora”, comentó Álvarez.

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Para el religioso, en el país hay quienes viven anclados en el pasado y eso les impide avanzar, arrastrar a la “gente” a no contar con un futuro o a que quienes mantienen el poder, decidan, erradamente, llevándose por delante el desarrollo de la sociedad y condenando a los nicaragüenses nuevamente a retroceder, sumirse en violencia, en más pobreza, desesperanza, aflicción y desánimo.

“Sobre todo en los más pobres y débiles que deben pagar en pobreza y mayores costos cómo sería cualquier insensatez de dialogar y negarnos la oportunidad de construir un país, entre y para todos, sin exclusión. Debemos de aprender, sobre todo deben aprender los actores políticos en cultivar la tolerancia, respetar el criterio de otros y evitar excluirlo”, esbozó el Obispo.

Monseñor Álvarez exhortó a recuperar la separación de poderes, a respetar los derechos humanos, a recuperar la seguridad jurídica, un sistema con sufragio democrático, justo y libre, demandas que realiza el 80% de los ciudadanos.

“Respetar este compromiso augura un país grande y próspero; de no hacerlo, lo estaríamos condenando a la pobreza y a la miseria y Nicaragua, hermanos, está hecha para grandes cosas, no renunciemos a ello, juntos lo podemos lograr”, culminó.

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