Jueza declara culpable a conductor y dueño de bus por la tragedia en Rancho Grande
En el juicio la Fiscalía, demostró que Orozco Cruz conducía bajo los efectos del licor la unidad que cubría la ruta Waslala – Matagalpa con 70 pasajeros a bordo.

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Tras un juicio oral y público que culminó la noche del martes, Douglas Orozco Cruz y Luis Martín Chavarría Orozco, fueron declarados culpables por ser los responsables de la muerte de 12 personas y 8 niños en el accidente del pasado 23 de diciembre en la carretera a Rancho Grande, Matagalpa.
En el juicio la Fiscalía, demostró que Orozco Cruz conducía bajo los efectos del licor la unidad que cubría la ruta Waslala – Matagalpa con 70 pasajeros a bordo. Detalla que el 22 de diciembre, un día antes de la tragedia y parte de la madrugada del propio 23, estuvo ingiriendo licor en compañía del propietario del automotor Chavarría López.
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Según la sentencia tanto el conductor y propietario del bus son responsables de provocar la muerte de 12 adultos y 8 niños. Esto implica que previeron la tragedia que podría ocurrir y, a pesar de ello, operaron la ruta. Además, se les imputa cargos por homicidio frustrado y exposición y abandono de personas para las víctimas sobrevivientes.
Durante el juicio el Ministerio Público pidió para Luis Martín Chavarría, propietario del vehículo, una pena de 15 años por homicidio, 10 años por homicidio frustrado y 2 años por exposición y abandono de personas, sumando un total de 27 años de cárcel.
Asimismo, para el ciudadano Douglas Otoniel Orozco Cruz, el conductor del autobús, se requirió una pena de 15 años por homicidio, 10 años por homicidio frustrado, 2 años por exposición y abandono de personas, además de 3 años por conducir bajo la influencia de alcohol o en estado de ebriedad, totalizando así una solicitud de 30 años de cárcel para él.
Sobre las pruebas presentadas ante el judicial indica que el bus se desplazaba a una velocidad de más de 100 kilómetros por hora en la bajada del puente Mancera, lo que le hizo que Douglas perdiera el control hasta estrellar la unidad contra la baranda del puente, causando la muerte de 20 personas.
Aunque el dueño del bus no viajaba en la unidad, enfrenta acusaciones por comisión por omisión, ya que no debió permitir que el conductor manejara el bus, sabiendo que habían estado consumiendo licor. La jueza sandinista Maribel del Rosario Parrilla Castillo, dará a conocer en los próximos días la pena que estos deberán cumplir.