Dictadura niega reingreso a Nicaragua al padre Juan de Dios García de la iglesia Santo Cristo de las Colinas

Este martes la dictadura de Daniel Ortega a través de Migración y Extranjería le negó el ingreso al país al sacerdote católico Juan de Dios García, quien es vicario de la parroquia Santo Cristo de las Colinas, en Managua, así lo confirmaron fuentes eclesiásticas al diario La Prensa.

Aparentemente el religioso salió del país hace dos meses para visitar a sus familiares en el extranjero, a quienes no veía desde hace tres años. Cuando gestionó su vuelo y registró sus motivos de viaje no tuvo ningún problema legal con las autoridades migratorias de Nicaragua.

Sin embargo, hoy que debía regresar no pudo abordar su vuelo por orden de Migración y Extranjería de Nicaragua al notificarle mediante un correo electrónico que no podría ingresar al país.

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“El padre estuvo dos meses de viaje en Estados Unidos, y hoy le tocaba regresar a Nicaragua, pero le prohibieron embarcar por órdenes de Migración y Extranjería. El domingo le enviaron un correo y ayer otro confirmando”, dijo una fuente a La Prensa.

En 2018, el padre García denunció ser víctima de amenazas de muertes en su contra y de una ola de desprestigio moral mientras dirigía la parroquia de Santiago, en el municipio de Jinotepe, en Carazo.

En ese momento, el religioso alegó que las amenazas comenzaron tiempo después que decidiera abrir las puertas del templo para acoger a los jóvenes que protestaban en contra del régimen sandinista y que sufrían represión por las fuerzas de choque de la dictadura.

Asedio en la parroquia Santo Cristo de las Colinas

El templo católico funcionó como un centro para asistir a personas heridas por la  brutal represión que desató la Policía Sandinista con armamento de guerra, sin imaginar que sería profanada por llamados “grupo de La Paz” afines a la dictadura de Ortega quienes ingresaron para robar y quemar pertenencias religiosas y de asistencia médica, todo a la vista y paciencia de la policía.

Al padre Juan de Dios García finalmente lo trasladan de Jinotepe a vicario de la Iglesia Santo Cristo de las Colinas en Managua, donde también vivió la persecución religiosa por agentes policiales.

Desde el 19 de mayo el templo católico permaneció bajo asedio policial por cinco días, luego que Monseñor Rolando José Álvarez, obispo de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, quien cumple 40 días en arresto domiciliar, se refugió en la parroquia tras ser víctima del acoso y persecución del régimen.

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La policía cercó las calles y la entrada principal del templo católico, mientras adentro permanecían monseñor Álvarez.

A pesar que el 23 de mayo la policía despejó el perímetro de la parroquia y se trasladó a la Curia Episcopal de Matagalpa, la persecución religiosa regresó al impedirle al padre García ingresar a su país.

En Nicaragua la dictadura encarcela a religiosos por razones políticas y condena a sacerdotes por delitos comunes bajo procesos judiciales irregulares, según denuncias del exfuncionario judicial Yader Morazán.

El contexto de persecución y ataque a la iglesia católica no cesa en Nicaragua, y se espera que en esta semana la Unión Europea sesione para condenar la represión religiosa en el país, como lo hizo la Organización de Estados Americanos (OEA) al aprobar una resolución en contra de Daniel Ortega.