Régimen Ortega Murillo se lucra con la migración y provoca a Estados Unidos
Expertos advierten que la migración está siendo utilizada como un arma geopolítica por el régimen de Ortega-Murillo en Nicaragua, en coordinación con Rusia, para causar caos en Estados Unidos.
- Nicaragua Actual
- Cortesía
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua ha sido acusado de utilizar la migración como un arma política para presionar a Estados Unidos, en coordinación con potencias como Rusia. Esta estrategia forma parte de lo que varios expertos denominan “guerra híbrida”, donde la migración no es solo una consecuencia de crisis internas, sino una herramienta geopolítica para desestabilizar a países objetivos.
Así lo señaló José Pallais, abogado y desterrado nicaragüense, durante el panel “Éxodos Manipulados: El Uso de la Migración como Arma de Guerra Política en la Era de los Autoritarismos”, donde se discutió la instrumentalización de los flujos migratorios con fines políticos.
El panel fue organizado por Expediente Abierto, centro de pensamiento centroamericano en el que participaron Marc Marginedas, periodista español y excorresponsal del diario El Periódico en Moscú; e Ignacio Montes de Oca, periodista y escritor argentino. Eduardo Ullibarri, exembajador de Costa Rica y catedrático, fue el moderador del diálogo.
LEA TAMBIÉN: EE.UU sanciona a otras empresas y ejecutivos de vuelos chárter por facilitar la inmigración
La investigación que revela los lucros del régimen sandinista con los migrantes coincidió con el anuncio del Departamento de Estado de aplicar sanciones a varios ejecutivos de agencias de viajes por facilitar la migración irregular.
“Estados Unidos impone hoy restricciones de visado a varios ejecutivos de agencias de viajes de Europa, África y Oriente Medio. Estas empresas se aprovechan de personas vulnerables al operar servicios diseñados principalmente para facilitar la migración irregular a Estados Unidos a través de países de Europa y del Hemisferio Occidental”, indicó Washington.
Las sanciones se aplicaron a los propietarios, ejecutivos y altos funcionarios de empresas que prestan servicios de viaje y transporte por tierra, mar o vuelos chárter diseñados para facilitar la migración irregular a Estados Unidos.
Ortega recibió US$100 millones por cobro a migrantes
El fin de la Ley de Ajuste Cubano en 2017, que anteriormente facilitaba la residencia a cubanos que llegaban a territorio estadounidense, obligó a estos migrantes a buscar nuevas rutas hacia el norte.
Nicaragua se convirtió en un punto de tránsito clave gracias a la decisión del gobierno de Ortega de eliminar el requisito de pasaporte para los cubanos que ingresaran al país. Este cambio legal permitió que cientos de cubanos viajaran a Nicaragua en vuelos chárter con el objetivo final de llegar a Estados Unidos.
Según Pallais, esta operación no solo generó importantes ingresos para el régimen, con beneficios económicos que rondan los 100 millones de dólares, sino que también convirtió a Nicaragua en un centro logístico de la migración ilegal.
LEA TAMBIÉN: Dictadura de Nicaragua se queja en la ONU por las sanciones
Además de cubanos, migrantes haitianos han sido protagonistas de esta estrategia. Más de mil vuelos han llegado a Managua con personas de Haití, quienes también buscan llegar a la frontera sur de Estados Unidos.
Pero la táctica no se ha limitado a migrantes latinoamericanos y caribeños; Nicaragua también ha recibido vuelos con migrantes de países africanos, consolidando aún más su papel como un “hub” de la migración indocumentada hacia Estados Unidos.
El apoyo ruso en la estrategia migratoria
Marc Marginedas, corresponsal internacional y panelista, sostuvo que la estrategia del régimen nicaragüense tiene similitudes con las tácticas utilizadas por el presidente bielorruso Alexander Lukashenko, quien ha permitido la entrada de migrantes irregulares a Europa como una forma de presión política. En ambos casos, se evidencia una estrecha coordinación con Moscú.
“Rusia tiene un interés claro en generar inestabilidad en la frontera sur de Estados Unidos”, afirmó Marginedas. Según su análisis, el Kremlin vería favorable el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca, y desestabilizar la región mediante la migración podría ser un factor que influya en las elecciones.
El uso de la migración como arma política por parte de Nicaragua y sus aliados tiene como objetivo desbordar la capacidad de respuesta de los países receptores y sembrar caos, sobre todo en el contexto de las elecciones presidenciales en Estados Unidos de noviembre.
Marginedas advirtió que “Rusia ha visto en este caos migratorio una oportunidad para debilitar a las democracias occidentales”, lo que agrega otra capa a la complejidad de las relaciones internacionales en el hemisferio.
LEA TAMBIÉN: Dictadura de Nicaragua da de baja a comisionado de la Policía de Rivas y jefe Auxilio Judicial
Crisis económicas y beneficios políticos de la migración
El fenómeno migratorio que afecta a Nicaragua no es un caso aislado en la región. Ignacio Montes de Oca, periodista y analista político, destacó que la migración masiva desde países con regímenes autoritarios y economías fallidas, como Venezuela, Cuba y el propio Nicaragua, es una realidad innegable.
La salida de más de 7.7 millones de venezolanos, 4 millones de cubanos y 1.4 millones de nicaragüenses refleja el colapso de estos Estados.
Sin embargo, a pesar de las críticas que podrían surgir por la migración masiva, Montes de Oca señaló que esta situación también representa un beneficio económico para los gobiernos, ya que las remesas enviadas por los migrantes se han convertido en una fuente importante de ingresos.
En países como México, Guatemala, República Dominicana y Honduras, las remesas son un pilar económico.
Montes de Oca subrayó que la influencia política de los migrantes en Estados Unidos, especialmente a través del voto latino, es cada vez más relevante, lo que podría ser utilizado como instrumento de presión política por los gobiernos de la región.
Propaganda rusa en América Latina y Estados Unidos
Rusia también ha estado activa en el terreno de la desinformación y la propaganda, especialmente en torno a la migración.
LEA TAMBIÉN: Youtuber Chico Reyes confirma destierro: “solicité ayuda a Migración y no me la brindaron”
Montes de Oca señaló que recientemente se desarticularon tres redes de propaganda rusa en Estados Unidos, una de las cuales estaba orientada específicamente a América Latina. Estas redes, financiadas con millones de dólares, buscaban polarizar aún más a la sociedad norteamericana en torno al tema de la migración.
Una de las campañas más notorias fue la denominada “Doppelganger”, que consistió en la creación de páginas web falsas para difundir información engañosa sobre la migración y sus efectos en la seguridad de Estados Unidos.
Montes de Oca explicó que esta propaganda no solo buscaba influir en la opinión pública, sino que también alimentaba la polarización política en torno a los migrantes.
La influencia rusa en la política de extrema derecha
Marginedas también destacó que, en Europa, los partidos de extrema derecha han sido los principales beneficiarios de los flujos migratorios irregulares. Estos partidos impulsan un discurso xenófobo que polariza a la sociedad y dificulta la creación de consensos. Esta estrategia es especialmente eficaz en el contexto electoral, ya que alimenta el miedo y la desconfianza hacia los migrantes.
En América Latina, la estrategia es similar. Según José Pallais, Rusia también ha promovido partidos de ultraderecha y extremistas de izquierda en la región con el objetivo de generar inestabilidad.
Moscú ve en la desestabilización una herramienta para debilitar a las democracias occidentales, creando una “internacional totalitaria” que apoya a los regímenes autoritarios de Nicaragua y Venezuela.
La instrumentalización de la migración por parte de estos regímenes autoritarios es una táctica peligrosa que no solo afecta a los migrantes, sino que tiene implicaciones profundas en la política global. La guerra híbrida, en este caso, busca crear desconfianza y división tanto en los países de destino como en las democracias occidentales.