Joven denuncia intento de femicidio por parte de reconocido empresario de Diriamba

Silgian Estela Aguirre Romero, de 25 años de edad, denunció ante la Comisaría de la Mujer en Carazo, el intento de femicidio del cual fue víctima de parte de su esposo Alex Bonilla, empresario de Diriamba, con quien tiene más de diez años de convivir legalmente.

De acuerdo a la denuncia de Aguirre Romero, el día sábado 22 de mayo de este año, Alex Bonilla le propinó varios puñetazos, patadas, intentó estrangularla y la amenazó con un arma de fuego, situación que ha venido viviendo desde que tenia quince años de edad cuando se casó con el señalado.

“El señor Alex Bonilla casi me mata a puñetazos, patadas, por vía del ahorcamiento y amenazándome con un arma de fuego, con la cual dijo me daría un balazo en la frente. Por suerte el arma no tenía balas, sino hoy fuera una más de la gran lista de femicidio en Nicaragua y en el mundo entero”, denunció la joven.

Aguirre refirió además que Bonilla esta huyendo tras haberla agredido violentamente y dejado en la calle, además de llevarse a sus tres hijos.

“Hago un llamado a las autoridades para que sean más beligerantes, ya que a la fecha, este señor se encuentra libre en sus negocios como que nada pasó y yo estoy en la calle sin un córdoba, maltratada, dañada física y psicológicamente y sin mis hijos”, manifestó la joven.

La denunciante la hizo un llamado a las instituciones, en este caso la Comisaría de La Mujer para que agilice las investigaciones, también llamó a los organismos de defensa de los derechos de las mujeres a que le brindaran acompañamiento y apoyo y a que se respetara su derecho a la vida y a todos los derechos que le asisten según la ley.

“Hago un llamado también el señor Alex Bonilla, que se presente que dé la cara. Por qué huye si tiene pruebas? Por qué huye si no ha hecho nada indebido, según él? Que se presente, que muestre los videos de su oficina donde ocurrieron los hechos, donde está evidenciado todo el maltrato de esa noche y donde está evidenciado que casi me ahorca y que, con pistola en mano, no terminó con mi vida porque no encontró la balas. Gracias a Dios y gracias a mi hija de 9 años que gritó por mi vida”, expresó Aguirre.

La joven pidió atención psicológica para ella y sus tres hijos y aseguró que no pueden estar conviviendo con un agresor. Llamó también a la Comunidad Evangélica de la Misión Senda de Paz, a los pastores, a quienes señaló de ser testigos del maltrato que Alex Bonilla le daba desde hace años.

“Hago un llamado al Señor Gilberto Bonilla, Pastor generacional de Ministerio Senda de Paz, mi padre espiritual y mi suegro, a que no apañe el pecado, ni la injusticia y que corrija dentro de su casa. Al pastor Richard Bonilla, mi cuñado, hermano de Alex Bonilla, que predique el amor con su ejemplo, porque a la fecha nadie se ha preocupado, ni interesado por mi vida. Espero en la Justicia de Dios y de las autoridades”, expreso Silgian.

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