San Sebastián volvió a encontrarse con sus viejos amigos, Santiago y San Marcos

Aunque las autoridades religiosas de la Basílica Menor de San Sebastián de Diriamba brindaron una serie de recomendaciones para celebrar a su santo patrono, San Sebastián este 19 de enero, las aglomeraciones de personas fueron difíciles de evitarse en el tradicional Tope de los Santos.

Aquí se impuso la fe, el fervor, religioso y la piedad popular en honor a “Guachán” por parte de sus devotos, quienes inundaron las calles de Diriamba para acompañarlo a encontrarse con sus viejos amigos Santiago de Jinotepe y San Marcos de la ciudad del mismo nombre, cuyas imágenes fueron llevadas en camionetas hasta el lugar donde se realizaría el encuentro.

Este año el Covid-19 obligó a que las autoridades eclesiales realizaran esta actividad religiosa no en el lugar donde marca la tradición que es en el municipio de Dolores, sino que se llevó a cabo en la misma Diriamba, a unos 100 metros del imponente Reloj Público diriambino.

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Durante este “pequeño recorrido” se hicieron presentes los bailes característicos de esta ciudad caraceña como fue el tradicional Güegüense o Macho Ratón, Las Inditas de Guacal, El Gigante y sin faltar el Baile del Viejo y la Vieja, estampas folklóricas del pentagrama nacional.

En el inicio de estas festividades religiosas, el párroco de esta ciudad, el sacerdote Cesar Castillo dijo que este año las fiestas patronales de San Sebastián, nuevamente tendrían restricciones con el fin de evitar contagios por el Covid-19 y más muertes en las familias diriambinas.

“Hago el llamado a ser responsables y a que todos llevemos puestas nuestras mascarillas como medio de protección”, dijo el religioso.

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Pese a que la Iglesia Católica ha sido prudente con estas festividades de San Sebastián para evitar contagios de Covid-19 entre la población, la alcaldía sandinista de Diriamba ha preparado un sinnúmero de actividades recreativas y culturales que provocan también aglomeraciones de personas.