Chile evita responder insultos de Ortega pero insiste en diálogo político para Nicaragua

La canciller de Chile Antonia Urrejola, uno de los países que patrocina la resolución que en las próximas horas emitirá sobre Nicaragua la 52 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se celebra en Lima Perú, prefiere no responder a los recientes insultos que propinó Daniel Ortega al presidente chileno Gabriel Boric y reitera su confianza en un diálogo para resolver la crisis en Nicaragua.

Hace dos semanas, el dictador Daniel Ortega llamó “perrito faldero” al presidente de Chile y “pobre negro” al principal encargado del Departamento de Estado de Estados Unidos para Latinoamérica, Brian Nichols, por exigir la liberación de los presos políticos en el país centroamericano.

Durante un acto por el 43 aniversario de la Policía sandinista y transmitido en cadena de radio y televisión, Ortega dijo que “se ha puesto de moda” pedir en foros internacionales que deje en libertad a los “presos políticos” de Nicaragua, y mencionó concretamente el caso del presidente chileno, quien lo hizo durante la Asamblea General de la ONU.

“En general mi práctica No es comentar las declaraciones que hagan otros presidentes, simplemente reiterar el compromiso que tiene Chile respecto a la situación de Derechos humanos en Nicaragua y sobre todo el compromiso que tiene el presidente de Chile respecto a los presos políticos en Nicaragua”, considera Urrejola al ser abordada por periodistas.

Crece preocupación por Nicaragua

Urrejola agrega que “estamos obviamente muy preocupados porque como vemos que en los últimos años el cierre de los espacios democráticos es cada vez mayor, en las últimas semanas se ve la persecución hacia la iglesia católica, la detención demás personas opositoras, se siguen cerrando organizaciones de la sociedad civil”, detalla Urrejola.

“Estamos sumamente preocupados y esperamos que en algún momento el gobierno de Nicaragua se abra un diálogo porque nos parece fundamental para el pueblo nicaragüense… en la crisis siempre hay que dialogar, pues claramente las exclusiones no han servido respecto a las crisis de derechos humanos”, reitera la canciller Urrejola.