Jueza sandinista condena a 5 años de cárcel a mujer que utilizaron para encarcelar a sacerdote de Nandaime

La dictadura de Daniel Ortega condenó a cinco años de cárcel a Martha Candelaria Rivas Hernández, por el supuesto delito de “falso testimonio”, tras asegurar que esta mujer nunca fue agredida físicamente por el sacerdote de Nandaime, Manuel Salvador García, como lo afirma la acusación del Ministerio Público.

La judicial sandinista María José Zapata Morales, del juzgado Segundo Local Penal de Granada, dictó este miércoles la sentencia condenatoria contra la mujer.

Zapata Morales fue utilizada por los mismos operadores políticos del régimen para encarcelar al sacerdote de Nandaime.

Durante la audiencia de anticipo de pruebas del pasado 17 de junio, Rivas Hernández declara que el golpe recibido en la nariz de parte del sacerdote fue accidental.

La condenada decidió no firmar la denuncia en la cual las autoridades determinan que el cura comete delito contra la mujer.

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El Ministerio Público asegura que el sacerdote García del municipio de Nandaime, en Granada, agredió físicamente a la mujer y le sumó el delito de amenazas en perjuicio de varios pobladores.

Estos pobladores son señalados de ser militantes sandinistas, por lo cual lo condenan a casi 3 años de cárcel.

Persecución política a la iglesia católica

Pese a la versión de la mujer, la justicia sandinista le dictó prisión preventiva.

La acusan por cometer el supuesto delito de “falso testimonio en perjuicio de la administración de Justicia del Estado de Nicaragua”.

De esta manera, quedó en evidencia que la mujer fue utilizada por la falsa justicia de la dictadura para enjuiciar al religioso católico.

La persecución y el hostigamiento político incrementó luego que este miércoles se conociera que el caso del sacerdote de la iglesia Perpetuo Socorro, de Boaco.

Monseñor José Leonardo Urbina, fue detenido por la policía sandinista y señalado por  supuestamente abusar sexualmente de una menor de edad.

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Tras conocerse la acusación de la Fiscalía, un grupo de feligreses católicos se reunieron este miércoles en el atrio de la iglesia para manifestarse en apoyo al religioso y exigir su liberación inmediata.