Panamá protesta contra actividades políticas de Martinelli desde embajada de Nicaragua
Según el mandatario panameño, Martinelli suele usar sus redes sociales para opinar sobre diferentes problemas locales y reiterar que su situación actual es parte de una supuesta “persecución política”.
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El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, denunció las actividades políticas realizadas por el exmandatario Ricardo Martinelli, desde la sede diplomática de Nicaragua en donde se encuentra asilado desde febrero de este año.
De acuerdo con Mulino, su administración se puso en contacto con la cancillería de Nicaragua su “preocupación” por las “expresiones” políticas de Martinelli desde la sede y les pidió no ser un “foco de reuniones políticas” y “solamente” limitarse a sus responsabilidades de asilo.
“Yo le pedí al canciller que hiciera eso (llamar a las autoridades de Nicaragua) para poner un poco de orden ahí, que cumplan con los convenios internacionales de asilo. Tan sencillo como eso. No transformemos ni esa ni ninguna embajada en un centro político ni de actividad político-partidista ni a favor ni en contra de nadie”, señaló Mulino en su rueda de prensa semanal.
Según el mandatario panameño, el expresidente panameño Martinelli (2009 -2014) suele usar sus redes sociales, dentro de la embajada de Nicaragua en condición de asilo, para opinar sobre diferentes problemas locales y reiterar que su situación actual es parte de una supuesta “persecución política”.
Esta no es la primera vez que la Cancillería panameña expresa formalmente a la embajada nicaragüense su rechazo por las expresiones de Martinelli, pues el Gobierno pasado de Laurentino Cortizo (2019-2024) envió varias notas reiterando su “enérgica protesta” por las acciones “político-partidistas” del exmandatario, ya que es “ilegal de conformidad con el derecho.
“Espero que la República de Nicaragua entienda eso y es la primera advertencia que hacemos en ese sentido”, dijo Mulino.
“En el lenguaje diplomático cuando llamas a un embajador a la Cancillería es porque el tema es serio”, expresó el actual mandatario. Enfatizó: “ahora, estamos ante un país que no tiene ni Dios ni Ley, en Nicaragua. Hay que entender también que no estamos trabajando con un país común y corriente respetuoso del derecho internacional, no respetan al internacional, el interno ni ningún derecho en Nicaragua“.
Agregó que Nicaragua “es un país bastante subgeneris en materia de apelar la suplicación del derecho. Eso no existe allí. No hay derecho en Nicaragua”.