Rosario Murillo llama “ingratos” a opositores que se revelan contra su modelo de paz

Una vez más Rosario Murillo se abalanzó en contra de los opositores desterrados recientemente, a quienes llamó “ingratos” por supuestamente amenazar y atentar contra la seguridad del país y las familias nicaragüenses.

Al llamar “ingratos” a los opositores, Rosario Murillo, codictadora de Nicaragua, confirmó el destierro de estos alegando que en el país pinolero,  no hay espacio para quienes quieran “asaltar la paz” del pueblo.

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Para trabajar en “paz y en armonía”, hay que “desterrar cualquier asomo de esa ingratitud, porque es ingrato el que atenta contra su hermano, contra su familia, rechazar cualquier intento de agredir la paz de asaltar la paz, y mantener esa seguridad”, dijo Murillo en su alocución de mediodía.

Añadió que desde que fueron “desterrados los ingratos”, Nicaragua vive en paz, en armonía, y la vida que merecemos para trabajar con seguridad sin amenazas más que las normales en este mundo de injusticia climática”, dijo en referencia a los desastres naturales.

Opositores excarcelados y desnacionalizados

La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a través del amañada Poder Judicial, el pasado 10 de septiembre despojó de su nacionalidad a un total de 135 ex presos políticos que fueron desterrados a Guatemala cinco días antes, y ordenó el decomiso de sus bienes en todo el país.

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Mediante una nota de prensa, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) controlada por el oficialismo, resolvió bajo el amparo de la Ley de Sobería (Ley 1055) y Ley Especial que regula la pérdida de la Nacionalidad Nicaragüense (Ley 1145), dejar en apatridia a 135 opositores de Ortega.

La Sala Penal Uno del Tribunal de Apelaciones, Circunscripción Managua, señaló que la confiscación de los bienes es una forma de retribuir al Estado sandinista los daños causados por los opositores, pero no justificaron cuáles son los daños a los que se refiere.