Ortega reniega por sanciones en Cumbre del ALBA y llama “demonios” a quienes critica este bloque socialista

“Las amenazas son de todos los días”, así asentó el dictador Daniel Ortega sus ataques contra Estados Unidos y quienes critican al bloque socialista conocido como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA-TCP), mismo que integra Nicaragua, el cual celebró este reciente fin de semana su XXIV cumbre en Caracas, Venezuela, en ocasión a su vigésimo aniversario.

Durante su discurso, Ortega defendió a los dictadores fallecidos Fidel Castro, de Cuba, y Hugo Chávez, de Venezuela, en un intento de endiosar los regímenes autoritarios que ambos tiranos impusieron a través de la violencia en sus países dando lugar a que organismos internacionales los reconozcan como violadores de derechos humanos y criminales de lesa humanidad.

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Luego de arribar a Caracas, el pasado sábado, Ortega como de costumbre, arreció sus insultos y ataques contra quienes rechazan esta organización (ALBA), sobre todo por las sanciones de EE.UU., a Venezuela, Cuba y Nicaragua, quienes integran este bloque socialista, por lo cual aprovechó para tildarlos de “demonios” y “enemigos de la paz”.

“Porque las amenazas son de todos los días, las conspiraciones son de todos los días, los intentos de agresión son todos los días, porque vos estás por la Paz, nosotros estamos por la Paz, pero el demonio es enemigo de la Paz y está por la destrucción”, expresó el eterno líder sandinista.

“Siempre están pensando cómo destruir este Proceso, un Proceso que ha venido a levantar a Nuestramérica”, añadió.

Ortega compara a Jesucristo con Hugo Chávez

Por otro lado, durante el mismo discurso el dictador sandinista se atrevió a insultar el nombre de Dios, que es considerado como una “blasfemia” por altos jerarcas católicos, al comparar a Jesucristo con el fallecido criminal y torturador Hugo Chávez.

Ortega inició diciendo que él se había convertido en un revolucionario porque conoció la vida de Cristo, pues insinuó que su supuesta “lucha” al frente del pueblo en 1979 fue “entre los pobres”, como lo hizo Jesús, e irreverentemente dijo que Dios era el “Revolucionario por Excelencia”.

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“Me hice Revolucionario porque conocí a Cristo, y Chávez cómo llevaba a Cristo, y era como que, cuando se reunieron Chávez y Fidel, y nuestros Pueblos estaban desangrándose, empobrecidos, sin mayores esperanzas, como que Cristo les había dicho: ¡Levántense y anden, y echen andar a los Pueblos de Nuestramérica Latina y Caribeña!”, sostuvo.