Presos políticos en Nicaragua ya son más de 200: Con nueva embestida represiva de Ortega

Familiares de miembros de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), denunciaron ante el colectivo de derechos humanos Nicaragua Nunca Más en Costa Rica, la embestida represiva desatada en los últimos meses por la dictadura de Daniel Ortega contra activistas de esta agrupación y de la organización política Unamos, que solo viene ha engrosar la lista de los presos políticos en el país.

En el mes de septiembre, la dictadura Ortega-Murillo, desató una nueva acción represiva en contra de la dirigencia territorial y militancia del Partido Unión Demócrata Renovadora (Unamos), organización miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco, la cual se ha ido extendiendo a otras organizaciones y ciudadanos opositores, señala un comunicado de la UNAB.

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“Esta embestida represiva ha dejado al menos 12 personas secuestradas de forma arbitraria en las celdas de tortura de “El Chipote”. Once de estas, ya han sido acusadas por la Fiscalía al servicio de la dictadura de Ortega, criminalizando el ejercicio de sus derechos y aumentando su lista de rehenes al estilo de las organizaciones criminales”, indica la denuncia de la UNAB, al refrerirse a los nuevos presos políticos en Nicaragua.

“Con estos actos represivos ya no podemos hablar de 180 o 185 prisioneros políticos; ahora fácilmente son más de 200 las personas presas políticas en las cárceles de la dictadura”, señala Gonzalo Carrión, director del Colectivo Nicaragua Nunca Más, con sede en Costa Rica.

El comunicado agrega que esta oleada represiva también dejado a un número considerable de miembros de la UNAB en situación de riesgo que se ven obligados a salir del país o bien a resguardarse internamente para no ser víctimas de capturas.

Violación a DDHH es una “responsabilidad internacional”

“Por ello, hoy la Unidad Nacional, a través de su Consejo Político, presenta y expone ante el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +, la denuncia de estos acontecimientos de capturas y procesos penales espurios en contra de sus miembros que violenta flagrantemente los derechos humanos consignados en los instrumentos internacionales suscritos y ratificados por el Estado de Nicaragua, violaciones que constituyen responsabilidad internacional, imputable únicamente a la tiranía Ortega-Murillo”, señala la denuncia.

Los denunciantes refieren que “las personas arbitrariamente detenidas se encuentran en total incomunicación, y sus familiares no han podido verles, así como tampoco les han mostrado públicamente, siendo este un patrón sistemático en la forma de transgredir los derechos humanos de la oposición política que es
apresada por la dictadura”.

Además consideran que toda esta represión “refleja el trato más inhumano y cruel en contra de los y las detenidas y sus familiares, al cual han agregado la modalidad de secuestro en contra de las familias de dirigentes perseguidos, que son capturas como forma de extorsión para que él o la perseguida se entreguen”.

“Tememos por las vidas de las 4 personas presas políticas en “El Chipote” y las 20 en “La Modelo” que han iniciado huelga de hambre exigiendo el respeto de sus derechos, mejores condiciones carcelarias y su liberación inmediata. Sus vidas corren peligro ante un sistema carcelario degradante de la dignidad humana”, destaca la denuncia.

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Aseguran que seguirán denunciando ante la comunidad internacional las graves violaciones cometidas por la dictadura Ortega-Murillo, “única responsable de lo que suceda con la vida y salud de los compañeros presos y presas injustamente”.

“Instamos a que la comunidad internacional aumente su presión diplomática y económica en contra de la dictadura que cada vez más se radicaliza y niega un futuro a los y las nicaragüenses”, finaliza la denuncia de la UNAB.