Docentes nicaragüenses celebran su día bajo manipulación y proselitismo político del régimen

El tendido educativo público de Nicaragua -controlado por el oficialismo- se ha teñido de adoctrinamiento político para el alumnado y se convirtió en un centro de manipulación y proselitismo para la comunidad docente que aún recibe un raquítico salario que no alcanza ni para cubrir el 60% del costo actual de la canasta básica en el país.

Este 29 de junio, la comunidad educativa celebra el Día del Maestro y Maestra Nicaragüense con la condecoración de un “bono especial” de apenas C$800 córdobas que fue entregado este martes, según medio oficialistas, a más de 60 mil docentes del Estado, como un incentivo en “reconocimiento” a su labor de formar profesionales.

Sin embargo, ni con este mínimo “incentivo” cada docente alcanza a comprar la canasta básica en Nicaragua. De acuerdo a declaraciones de una maestra de educación secundaria, quien prefirió el anonimato por temor a represalias, el salario mínimo para un docente oscila entre C$8,500 (con los ajustes salariales) y C$10,000.

Mientras que la canasta básica en Nicaragua se cotiza en C$17,332 según el último reporte de mayo del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE), lo que indica que el salario de un docente sigue siendo insuficiente para costear cada uno de los 53 productos que conforman la cesta familiar.

El profesor Gabriel Putoy, miembro de la Unidad Sindical Magisterial, dijo a Nicaragua Actual que ese bono es “una reivindicación social de gobiernos anteriores, no del gobierno de los Ortega-Murillo” y que no es considerado un premio porque “ni siquiera alcanza para pagar los recibos de agua y luz”.

Control estatal en los colegios públicos del país

Como si esto fuera poco, la manipulación política constituye otro factor negativo que asfixia a la mayoría de docentes nicaragüenses al ser obligados a participar en diferentes actividades políticas y ferias organizadas por las alcaldías municipales, que de no asistir corren con “la suerte” de ser despedidos y engrosar la inmensa lista del desempleo en el país.

Putoy, quien es originario de la ciudad de Masaya y excarcelado político, denunció que este 29 de junio “no hay mucho que celebrar, pero sí mucho que conmemorar” al recordar los despidos “totalmente arbitrarios” de docentes y las muertes de otros que batallaron contra la infección del coronavirus.

De acuerdo a sus declaraciones, más de 150 docentes fueron despedidos desde 2018 hasta mayo de 2022 bajo argumentos “injustificados” y con base en el “artículo 32, inciso 4, de la Ley 114, Ley de Carrera Docente, que expresa que se procede a la destitución del educador porque su conducta es contraria a la ética profesional”.

“Nosotros sabemos que ellos han sido despedidos porque no han utilizado un lenguaje partidario con los estudiantes, se han opuesto a las directrices partidarias de los delegados municipales y de los secretarios políticos del gobierno ilegítimo”, dijo Putoy.

Asimismo, señaló que más de 90 docentes murieron durante la pandemia del Covid-19, tras contraer el patógeno “por irresponsabilidad del gobierno ilegítimo que los obligó a dar clases sin ninguna protección sanitaria”.

Asesinan a profesor de Masaya durante las manifestaciones 

A la vez, destacó la muerte del profesor Carlos Erick López, de 23 años de edad, originario del municipio de Niquinohomo, Masaya, quien fue asesinado en el marco de las protestas antigubernamentales que se originaron en abril de 2018.

“Llegamos exigiendo nuestras reivindicaciones sociales, aumentos salariales, respecto a nuestro trabajo, nuestra integridad física, y hacemos memoria por los miles de maestros que a lo interno de Nicaragua están siendo desplazados sin su consentimiento, violando la Ley de Educación y la Ley de Carrera Docente”, puntualizó el opositor.

El reconocido profesor señaló que actualmente la Asociación Nacional de Educadores de Nicaragua (Anden) es considerada el brazo represor del dictador nicaragüense, Daniel Ortega, a través de la cual controla toda la comunidad de docentes en el país. No obstante, envió un mensaje de “ánimo” a todos los y las docentes del tendido educativo del país y manifestó que sólo con la “antorcha de la educación” Nicaragua volverá a la sendas de la democracia.

“Con la antorcha de la educación sacaremos al filibustero gobernante ilegítimo en nuestro país para que reine la democracia, la justicia y que nunca más un sindicato se preste a ser el brazo opresor de los docentes”, finalizó.