Hermanas de la Caridad: Nos invade un profundo dolor al dejar a las personas más necesitadas de Nicaragua

Tras concluir la misa de recibimiento de las Hermanas Misioneras de la Caridad de Madre Teresa de Calcuta en Costa Rica, la hermana provincial Agnesitha, lamentó la expulsión de la comunidad religiosa de esta orden en Nicaragua y aseguró que el mayor sentimiento de tristeza fue haber abandonado “a las personas más necesitadas y al pueblo mariano”.

“Nosotras las misioneras de la Caridad de Madre Teresa de Calcuta pedimos a Dios que nos bendiga a cada una de nosotras con su amor tierno y misericordioso. Al ser expulsadas de Nicaragua nos invade un profundo dolor al tener que dejar a las personas más necesitadas y al pueblo mariano”, dijo la hermana misionera Agnesitha.

LEER MÁS: Monseñor Báez: “Solo corazones enfermos y mentes oscuras son capaces de expulsar el amor de Dios”

La religiosa también agradeció el apoyo de benefactores, sacerdotes y otras comunidades laicas, quienes respondieron a las necesidades de las hermanas durante “esta situación de dolor e incertidumbre”.

“Estarán siempre presentes en nuestras oraciones y en nuestro corazón agradecido. Sabemos que nuestro espíritu estará siempre con ustedes Nicaragua. Muchas gracias Nicaragua. ¿Quién causa tanta alegría? La Concepción de María”, finalizó la hermana misionera.

“Estamos contentos de que ellas están seguras en este pueblo”

La comunidad de religiosas fueron recibidas este jueves con una misa presidida por monseñor José Rafael Quirós, en compañía de personas voluntarias, en la casa Provincial de las Hermanas, en Coronado, San José.

“Agradecemos a la diócesis y a todo Costa Rica por el amor con el que nos han recibido, solo palabras de agradecimiento nos salen del corazón y hablo por todas mis hermanas”, agregó la hermana provincial.

Tras conocer que las Hermanas Misioneras de la Caridad de la orden de Madre Teresa de Calcuta serían expulsadas del territorio nicaragüense, las oraciones, ayunos y rezos del rosario por su bienestar no se hicieron esperar por parte de la feligresía católica de Costa Rica, expresó Cecilia, quien se identificó como voluntaria.

“Fue muy triste, pensábamos que tenían sed, hambre, y pensamos que les podían hacer daño. Sabíamos que las lágrimas eran muchas por quienes dejaron allá (Nicaragua), los niños, esas jóvenes, adultos mayores; ellas venían con el corazón hecho pedazos y nosotros también aquí orando”, expresó Cecilia.

LEER MÁS: GALERÍA | Misa de bienvenida en Costa Rica a hermanas misioneras de la Caridad de Madre Teresa de Calcuta

Al ser cuestionada sobre la persecución a la iglesia en Nicaragua, la feligrés dijo “nosotros solamente oramos por Nicaragua, somos voluntarias”.

Trabajo de las Hermanas de la Caridad en Nicaragua

Las hermanas de la caridad atendían dos comunidades en Managua y otra en Granada. En la capital las religiosas cuidaban de un hogar de adultos mayores, una guardería y un comedor para los más desposeídos. También asistían a 235 familias con canastas básicas mensuales y acompañamiento espiritual y catequesis a las parroquias vecinas.

En Granada se atendía a jóvenes niñas de escasos recursos y se les ayudaba en sus estudios. También disponían de un espacio de reforzamiento escolar para niños, un comedor para los más necesitados, canastas básicas para las familias, catequesis y evangelización.

Además que se ayudaba puntualmente a los que necesitaban medicinas y apoyo económico a universitarios de escasos recursos y asistían a prisioneros hermanos privados de libertad.