Nicaragüense regresa al país luego de quedar casi ciego en EEUU

Luego de migrar desde Costa Rica hacia los Estados Unidos, el nicaragüense Román Antonio González, de 48 años de edad, logró regresar país tras quedar casi ciego y con problemas auditivos, según confirmó Texas Nicaraguan Community.

Mediante una publicación en redes sociales, la organización de migrantes agradeció la ayuda con la que pudo regresar al país al cumplir un año de haber llegado a suelo estadounidense.

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Gonzáles vivía en Costa Rica, pero el año pasado decidió sumarse a la ola de migrantes nicaragüenses que emprendieron su viaje hacia los Estados Unidos, país al que llegó en octubre del mismo año con la finalidad de obtener mejores oportunidades económicas. Junto a su pareja, optaron por quedarse en San Antonio, Texas.

No obstante la destino le dio “una mala jugada”. El nicaragüense empezó a desmejorar en marzo de este año. Según la organización, “comenzó a tener dolores fuertes de cabeza y mareos”, y aunque intentó controlar los malestares con “analgésicos de la farmacia”, el hombre continuó padeciendo estos síntomas, incluso, un día que “se levantó completamente ciego”.

Sin ayuda ni asistencia, solo en el hospital

Los amigos y su pareja quedaron anonadados de la situación que padecía el nicaragüense. Por ello, decidieron trasladarlo al hospital donde le detectaron una bacteria que le estaba afectando la vista, el oido y parte de cerebro, provocando que perdiera el balance para caminar.

“La bacteria ya había avanzando en su organismo y tenían que darle tratamiento de inmediato y no le garantizaban que el tratamiento funcionara”, indicó Texas Nicaraguan Community.

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Tras conocer el diagnósticos, la pareja del nicaragüense y sus supuestos amigos decidieron abandonarlo a su suerte en el centro médico. Así permaneció por tres meses y hasta que a finales de julio fue dado de alta y trasladado a un albergue.

Ayuda para regresar

Actualmente, Gonzáles ha perdido el 60% de la vista, parte de la audición y está aprendiendo a usar el andarivel. El nicaragüense se puso en contacto con su pareja para que le entregara sus documento como el pasaporte, pero esta persona se negó rotundamente. Con ayuda de Texas Nicaraguan Community lograron recuperar los documentos.

“Yo no pido dinero, lo que quiero es regresarme, mi madre se ha enfermado de ver mi situación y quiero regresar vivo (….) Aquí ya no hago nada, Dios me dio una segunda oportunidad de vivir. Quiero regresarme. Por favor, ayúdenme”, suplicaba el nicaragüense.