Familiares de Evelyng Pinto temen que su salud se desplome: “Es una bomba de tiempo”

Familiares de la presa política de la dictadura sandinista, Evelyng Pinto, de 63 años de edad, temen que su salud empeore al cumplirse 11 meses desde su secuestro y traslado a las mazmorras del Sistema Penitenciario La Esperanza, donde permanece en cautiverio sin atención médica especializada.

Evelyng Pinto, quien fue detenida ilegalmente por la policía sandinista el 6 de noviembre del 2021 y fue acusada, juzgada y condenada sin pruebas por la justicia de Daniel Ortega, padece insuficiencia renal crónica, hipertensión, hernia hiatal, artrosis, y es sobreviviente de cáncer.

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Mediante un comunicado, los familiares de la rea de conciencia demandaron al régimen el cese de tratos crueles e inhumanos al mantenerla prisionera sin atención especializada, a pesar de haber presentado dolencias musculares, calambres, crisis hipertensiva, síntomas covid (sin confirmar ya que no le hicieron prueba covid), infección en vías respiratorias y
alergias varias.

“Pronto cumplirá un año privada de libertad y aún no se le ha realizado el chequeo medico requerido para el control de sus enfermedades. Ella necesita realizarse exámenes periódicos al menos cada dos o tres meses”, dicta el comunicado de sus familiares.

🚨⚠ #Alerta | Familiares de la presa política Evelyn Pinto de 63 años de edad, piden realizarse exámenes de salud, ya que padece de enfermedades crónicas y su última prescripción médica fue hace 6 meses. https://t.co/UinEcGZo3Z pic.twitter.com/lzeGhozNEG

— NicaraguaActual (@NicaraguaActual) October 14, 2022

El 31 de marzo de este año, Pinto fue trasladada desde El Chipote hacia el Penal de mujeres conocido como La Esperanza, en Granada, donde deberá cumplir una condena de 8 años de prisión y 500 días multa por la supuesta comisión de los delitos de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional”, y “propagación de noticias falsas”.

Médico ordena practicarle exámenes pero dictadura se niega

La familia asegura que Pinto recibió una valoración médica desde hace seis meses, y se prescribió y ordenó “una serie de exámenes médicos” que debían practicarle a la rea política para el control de sus enfermedades y la dosificación de sus medicamentos.

Sin embargo, desde entonces la dictadura se niega a cumplir con sus obligaciones para proteger la integridad física de la presa política, quien podría estar en riesgo debido a sus antecedentes médicos.

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“Su condición de persona con insuficiencia renal crónica es una bomba de tiempo, de forma silenciosa sus riñones pueden estar sufriendo daños irreversibles”, agrega la misiva.

“Por esta razón demandamos, atención médica especializada y la realización de exámenes especializados: por su insuficiencia renal crónica y controles hormonales por ser sobreviviente de cáncer”, finaliza.

La condición de salud de pinto también la padecen varias personas presas políticas condenadas por razones comunes en Nicaragua, en su mayoría por su avanzada edad, quienes padecen enfermedades crónicas que aún no son atendidas por médicos especialistas.