Más de 500 empleados de la dictadura y aliados de Ortega se quedan sin visa para viajar a EEUU

A través de un comunicado de prensa, el Departamento de Estado de los Estados Unidos (EEUU), anunció la revocación de la visa a más de 500 individuos nicaragüenses y sus familiares, por ser miembros del gobierno de Daniel Ortega o por ser personas que se benefician de las políticas o acciones que impiden el retorno de la democracia a Nicaragua.

“Hoy anunciamos medidas para imponer restricciones de visa a más de 500 individuos nicaragüenses y sus familiares. Lo hacemos en virtud de la Proclamación Presidencial 10309, que suspende la entrada a Estados Unidos como inmigrantes y no inmigrantes de miembros del Gobierno de Nicaragua y otras personas que formulan, implementan o se benefician de políticas o acciones que socavan a las instituciones democráticas o impiden el retorno a la democracia en Nicaragua”, señala el comunicado de EEUU.

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Estas personas que se quedan sin visa para viajar a EEUU incluyen a los miembros de los servicios de seguridad nicaragüenses, como la Policía Nacional de Nicaragua, los funcionarios penitenciarios, los jueces, los fiscales, los funcionarios de la educación superior y los actores no gubernamentales que permiten la represión y la corrupción del régimen, así como sus familiares.

Ningún miembro del gobierno nicaragüense ni nadie que facilite los abusos del régimen de Ortega-Murillo debe creer que puede viajar libremente a Estados Unidos, destaca el Departamento de Estado.

La Casa Blanca también anunció una enmienda a la Orden Ejecutiva (E.O.) 13851 sobre Nicaragua que amplía las autoridades de sanciones, incluyendo medidas específicas relacionadas con el comercio para Nicaragua.

Estas nuevas autoridades apoyarán nuestros esfuerzos para que el régimen de Ortega-Murillo rinda cuentas.

“Las acciones aceleradas del régimen este año cerrando el espacio para la sociedad civil, aumentando su cooperación en seguridad con Rusia, y silenciando las voces independientes a pesar de los amplios llamamientos internacionales al diálogo y la moderación obligan a Estados Unidos a actuar”, señala el Departamento de Estado.

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Agrega que “los gobiernos que niegan los derechos básicos de su pueblo o amenazan los intereses de seguridad de sus vecinos no deben esperar que sus relaciones políticas, económicas y comerciales no se vean afectadas”.

Junto con el anuncio de la Orden Ejecutiva, la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones a la Dirección General de Minas de Nicaragua, una oficina del Ministerio de Energía y Minas, y a Gregorio Lenin Cerna Juárez, un confidente cercano del presidente nicaragüense Ortega, de acuerdo con la Ouden Ejecutiva 13851.

“Estados Unidos, junto con nuestros aliados y socios, cree que es esencial el retorno a la democracia y el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales en Nicaragua. Utilizaremos las herramientas diplomáticas y económicas disponibles para promover la rendición de cuentas del régimen Ortega-Murillo, reiterar nuestro llamamiento a la liberación inmediata e incondicional de los presos políticos, e instar a la restauración del espacio cívico para el pueblo de Nicaragua”, refiere el comuicado oficial.