Sanción de EE.UU. a minera estatal es un “bloqueo preventivo” a llegada del oro ruso, según exdiputado

Tras conocerse de la sanción del Departamento del Tesoro contra la estatal Empresa Nicaragüense de Minas (ENIMINAS) y su presidente Ruy López Delgado, el ex diputado liberal Eliseo Núñez, advirtió que podría tratarse de un bloqueo preventivo por parte de EE.UU para impedir que Nicaragua haga negocios con el oro proveniente de Rusia, tal como ya lo venía haciendo con el oro de Venezuela.

Este viernes 17 de junio se conoció que la  Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los EE. UU. sancionó a ENIMINAS y a su representante, de conformidad con la Orden Ejecutiva (EO) 13851.

Según el exdiputado liberal Eliseo Núñez, el régimen de Daniel Ortega ha venido introduciendo a Nicaragua oro proveniente de Venezuela para después hacerlo aparecer como parte de las exportaciones nicaragüenses.

“Lo que pasa es que hay pruebas de que el oro venezolano fue metido al país y sacado como exportaciones de Nicaragua y esto mismo puede pasar con Rusia porque hay sanciones sobre el oro ruso, es decir para que esté sea tranzado en el mundo”, expresó el exdiputado a Nicaragua Actual.

El exdiputado agregó que “esto no es más que un bloqueo preventivo que hacen para que los rusos no pueden ocupar Nicaragua como plataforma para vender oro”, opina Núñez.

Núñez además que es sospechoso que “el presidente o CEO de Calibre Mining, el canadiense (Darren Hall) haya dicho que iban a meter 20 millones de dólares para aumentar la extracción de oro en Nicaragua, lo cual pudiese ser un campanazo de que iban a inflar las cifras en los siguientes meses y años para darle cabida al oro venezolano que ya estaba entrando y ahora al oro ruso”.

“Hay demasiadas cosas en el ambiente y Calibre Mining no ha sido lo más transparente, y definitivamente causa sospecha porque a esta empresa se le han autorizado particularmente concesiones que rompen todos los parámetros medioambientales”, considera el exparlamentario.

El exparlamentario señaló que cuando fue diputado conoció que debajo del pueblo de Santo Domingo estaban excavando túneles que contaminaron los pozos de la población y el alcalde, que no era sandinista y otros representantes de instituciones del gobierno “se hacían de la vista gorda”.

“Esta empresa (Calibre) tenía una protección a nivel central entonces ahora que dice que con apenas 20 millones de dólares van aumentar un montón la producción, definitivamente es sospechoso… pero no solo es esa empresa, hay otros como los güiriseros y otros más que no son controlados y que definitivamente por esa vía pueden meter oro de países que están sancionados como Rusia o Venezuela.

“Un trabajo oscuro”

Núñez agrega que “este es un trabajo muy oscuro y aquí tenés dos cabezas: La privada de Calibre Mining y la cabeza pública de ENIMINAS. Entonces a través de ellos circula una gran cantidad de concesiones de oro y todavía falta por ver a fondo a todas las empresas mineras que están metidas en esto”, advierte el exdiputado liberal.

“Pero particularmente Calibre y ENIMINAS tienen una circulación que no es nada virtuosa, que se ha convertido básicamente en la manera en que alimentan al aparato represivo, a través de ventas de oro qque provienen de Venezuela”, concluye Núñez.

Por su parte, Damaris Rostrán, integrante de la Diáspora nicaragüense, dijo que “sabemos que la explotación de las minas es una de las vías que ellos utilizan para seguirse alimentando, para seguir reprimiendo a la gente en Nicaragua… pero con estas sanciones se espera cerrar todo el círculo de alimentación financiera que tiene el régimen”.

Uno de los “negocios” de la dictadura

También Haydee Castillo, quien forma parte de la oposición orgaizada en el exilio, dijo que “producto del modelo neoliberal extractivo de los recursos naturales que impulsa la dictadura, este se usa como uno de los principales negocios de la dictadura”.

“El único responsable de estas medidas de sanciones es el propio régimen porque no ha escuchado ninguna de las peticiones de la comunidad internacional y para nadie es un secreto que el negocio de la minería está en manos de la dictadura y sus allegados”.

Castillo considera que “el negocio de la minería no le deja ganancias al pueblo de Nicaragua y apenas genera un poco más de 4,000 empleos, y ya el Departamento de Estado ha dicho que estas medidas son producto de la profundas relaciones entre Nicaragua y Rusia, mientras está libra una guerra contra Ucrania”.

“Estados Unidos también aduce el argumento de que el régimen está utilizando los ingresos procedentes del oro para seguir oprimiendo al pueblo de Nicaragua y realizar acciones que suponen una amenaza para la seguridad del hemisferio”, destacó Castillo.