Murillo le pide a Dios que “el dolor no le sea indiferente”, mientras trata con crueldad a presos políticos

La vicepresidente designada por el Consejo Supremo Electoral, Rosario Murillo, parafraseó en su alocución de este lunes la canción “Sólo le pido a Dios” de la cantautora chilena Mercedes Sosa, al referirse a su sentir por la celebración del “Día de la Victoria” que conmemora Rusia.

Murillo, en tono muy ahuecado y tristeza fingida, expresó que esta madrugada una representación nicaragüense asistió con mucha emoción, “recogimiento” y admiración, al monumental desfile del Día de la Victoria sobre el nazismo, realizado en Moscú.

“¡Cuánto dolor! ¡Cuánto sufrimiento! ¡Cuánto tuvo que soportar el mundo de sufrimiento, de dolor de familias enteras que migraban huyendo del horror del nacismo! y cuánto heroísmo y cuánta valentía de los soldados que combatieron el horror del nacismo y que vencieron el nacismo”, dijo Murillo.

En un discurso que dista de su verdadera actitud, la vicepresidente destacó el sufrimiento que vivieron familias tras quedar sin sus padres, hermanos, abuelos, a causa de la guerra y la migración que ocasionó el nacismo.

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“¡Cuántas familias quedaron sin padres, sin hermanos, sin abuelos, sin tíos, sin parientes, todas las familias!”, exclamó Murillo en su monólogo cotidiano.

No obstante, las palabras de Murillo, al parafrasear parte de la letra de la canción de Mercedes Sosa, no son consecuentes con el actuar de su régimen que ha sido señalado por la represión, los crímenes de lesa humanidad, el desplazamiento y el exilio forzado de centenares de miles de nicaragüenses, el encarcelamiento de opositores, periodistas, analistas, empresarios, campesinos  y el asesinato de más de 350 personas, según han documentado la CIDH, GIEI y organismos defensores de derechos humanos.

La vicepresidente agregó que ellos han sufrido el horror del capitalismo y del imperialismo y sus ansias y apetitos; y se unen e identifican con el “dolor y en el recuerdo vivo”.

“Sólo le pido a Dios que el dolor no me sea indiferente, que la reseca muerte no me encuentre, vacía y sola sin haber hecho lo suficiente. Sólo le pido a Dios que lo injusto no me sea indiferente, que no me abofeteen la otra mejilla, después que una garra me arañe de esta suerte. Sólo le pido a Dios que la guerra no me sea indiferente, es un monstruo grande y pisa fuerte, toda la pobre inocencia de la gente!”, recitó Murillo.

Régimen mantiene a 182 personas presos políticas bajo tortura

Según organismos como el Mecanismo de Reconocimiento de Personas Presas Políticas y el Observatorio Nicaragüense contra la Tortura, en sus informes identificaron y documentaron distintas formas de torturas y tratos crueles que viven todas las personas presas políticas de la dictadura y sus familiares.

El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más hasta la fecha ha documentado 73 casos de torturas y tratos crueles, inhumanos y degradantes, todos a personas detenidas a raíz de las protestas sociales que iniciaron en abril del 2018.

De estos 73 casos, se estima que al menos 11 personas han sido detenidas en centros clandestinos o irregulares.

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Por su parte, el mecanismo documenta que en los centros de detención del Sistema Penitenciario Nacional (La Modelo, La Esperanza, Waswalí-Matagalpa, Chinandega, Chontales, Estelí y Granada), continúan los reportes de malos tratos, insalubridad y falta de atención médica a las personas presas políticas.

De las 30 personas detenidas en la Dirección de Auxilio Judicial “El Chipote”, 27 fueron condenadas. En este centro continúa el régimen de aislamiento para las personas detenidas y el incumplimiento a las reglas internacionales “Nelson Mandela” para el tratamiento de personas detenidas.