Abogado sandinista reafirma lealtad al régimen a pesar de ser reprimido por sus leyes
Harry Valle fue señalado en 2022 de simular la defensa de un sacerdote injustamente acusado por la dictadura de un crimen sexual.
Harry Valle, abogado sandinista en el Complejo Judicial de Matagalpa.
- Redes Sociales
Harry Antonio Valle Palacio mantiene su lealtad a los codictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, y al Frente Sandinista, a pesar de que encara un cargo bajo una de las leyes mordaza de la dictadura, la Ley (1042) especial de ciberdelitos interpuesta el 12 de noviembre por un fiscal del Ministerio Público.
La acusación emanaría, en concreta, de una serie de publicaciones despectivas en Facebook realizadas por Valle en contra del antes mencionado fiscal, testigos y presuntas víctimas en un caso que el abogado presidía en la ciudad de Matagalpa.
“Cuando gente que ni conoces te odia sin razón, no es un problema tuyo. Es una radiografía de lo podrido que puede estar el ser humano por dentro. La maldad, la envidia y la frustración ajena buscan siempre un blanco donde descargar su miseria, y a veces ese blanco sos vos”, dijo Valle en relación a las acusaciones.
Pese a la situación, Valle insiste en que el Sistema Penal de Nicaragua no es el culpable, ni mucho menos la dictadura sandinista, sino que responsabiliza únicamente al fiscal —que no nombra—, a la vez que expresa “nuestro buen gobierno dirigido por el comandante Daniel Ortega y la compañera Rosario Murillo, hacia quienes siempre he expresado mi simpatía y lealtad“.
Pero en un principio Valle sí había expresado, por medio de sus redes sociales, que el sistema judicial estaba siendo “instrumentalizado”.
“Este es un ataque personal de dicho funcionario, de quien omito el nombre, pero que pido a nuestras autoridades investiguen“, dice ahora el abogado.
El fiscal en cuestión es Wilber Eduardo López Martínez. López acusó a Valle luego de que el abogado cuestionase a un juez que lo declaró en abandono de la defensa en el caso de una cajera acusada de robar a la empresa Air Park International.
Valle había amenazado a medios de comunicación en 2022 con aplicar esta misma ley en su contra por señalamientos de su cercanía con el régimen y su conflicto al llevar este la defensa del obispo José Leonardo Urbina, acusado falsamente por la dictadura de abuso sexual contra una menor.
El primer defensor de Urbina, el abogado Frank Gutiérrez, había denunciado irregularidades en el proceso contra el religioso y por ello fue impedido de regresar al país. Valle reemplazó a Gutiérrez, pero renunció a la defensa poco después, lo que le valió señalamientos de fraude procesal.
El padre Urbina fue condenado a 30 años de prisión.