Dictadura de Nicaragua responde: “no hay persecución religiosa”, pero mantiene a 18 sacerdotes secuestrados

Por tercer día consecutivo la vicedictadora sandinista, Rosario Murillo, dedicó sus acostumbrados ataques contra de obispos y sacerdotes de Nicaragua, aduciendo de la manera más infame que en Nicaragua no existe la persecución religiosa, mientras mantiene a 18 religiosos en las mazmorras de La Modelo.

“Falso que hay persecución religiosa. Si arrestan a un cura por algo será, eso no es persecución religiosa, por siglos han creado leyes hasta por encima del Rey de Reyes”, dijo Murillo en su farisaico discurso.

La número dos del régimen dio a entender que ninguna persona está exenta de enfrentar la justicia por algún delito cometido “porque ninguno es más que otro”, sin embargo, en el caso de los obispos, sacerdotes y seminaristas secuestrados, se encuentran bajo las garras de la dictadura sin ninguna causa judicial, simplemente por denunciar la persecución política contra la iglesia y sus miembros.

LEER MAS: CIDH otorga medidas cautelares a Freddy Quezada y Abdul Montoya: están en «situación de gravedad»

“Si capturan a un tejedor de hamacas por X o Y cosa, por falta de balandrán, no ladrarán, no dirán ‘hay persecución a la artesanía preciosa'”, vociferó.

“Los tejedores no se creen por arriba de nadie y ni por debajo, trabajadores son, no piden, no viven de dádivas, para traban hamacas, no ataques contra la patria que amamos”, dijo Murillo en referencia a los sacerdotes, a quienes ha acusado de supuestamente apoyar y financiar el supuesto fallido golpe de Estado durante las protestas de 2018.

También comparó que si un médico es apresado por alguna falta o negligencia, “no van a decir hay persecución a la ciencia médica. Un buen doctor no se cree más que el paciente ni de la constitución rectora, cura y cura de verdad a la gente, porque asume el juramento hipocrático en su vida personal y profesional; no es hipócrita y no es cínico”.

Las palabras de Murillo solo esputan las mentiras que salen de su boca, pues mientras asegura que los médicos están para “salvar vidas”, ella fue quien violentó el juramento hipocrático al ordenar a todos los médicos trabajadores del Estado, a no atender a todos los heridos de bala que participaron en las protestas antigubernamentales de 2018.

LEER MAS: Murillo justifica secuestro de sacerdotes acusándolos de provocar con «discursos de odio»

Asimismo, manifestó que si un guitarrista va a la cárcel por algún acto delictivo, “nadie dice se acosa a los artistas sin motivo”. Los músicos no se sienten en las alturas, no nacieron para meter ruido ni desorden”.

En ese caso, tanto el sector médico, como el artístico y el magisterio, fueron víctimas de persecución y encarcelamiento. Médicos por ofrecer su ayuda en los tranques para asistir a los heridos; artistas por crear canciones alusivas a las protestas azul y blanco; y maestros por opinar en contra de las atrocidades cometidas por el régimen sandinista.