Cardenal Brenes pide que situación de monseñor Álvarez se “resuelva pronto”

Durante una visita al santuario nacional Jesus del Rescate de Popoyuapa, en el departamento de Rivas, el cardenal nicaragüense Leopoldo Brenes se refirió sobre la situación de secuestro en la que permanece el obispo de Matagalpa, Monseñor Rolando Álvarez, y dijo que “ojalá pronto pueda solucionarse todo”.

En entrevista a la plataforma digital Intertextual, Brenes aseguró escuetamente que Monseñor Álvarez “está bien” tras su secuestrado por la dictadura de Daniel Ortega desde el pasado mes de agosto, y exhortó a la feligresía a seguir orando para que “pronto pueda solucionarse todo”.

“Sabemos que está bien y la solicitud es que sigamos orando, que Dios le dé la fortaleza, lo proteja, lo cubra y ojalá que pronto pueda solucionarse todo”, respondió rápidamente el jerarca católico ante los cuestionamientos de este medio independiente que intentaba conocer sobre la última visita a monseñor Álvarez.

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Salud de monseñor Álvarez es imprecisa

Recientemente el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) exigió a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo que muestre a Monseñor Álvarez al cumplirse este pasado miércoles 70 días de haber sido secuestrado por agentes de la Policía Sandinista, brazo represor del régimen, y por desconocerse el paradero del religioso.

“Monseñor Rolando Álvarez cumple 70 días de secuestro. EXIGIMOS al régimen Ortega Murillo que lo muestre, también exigimos su libertad inmediata y la de todas las personas presas políticas. ¡Libertad para Monseñor Álvarez!”, denunció el Cenidh en su cuenta de Twitter.

Este organismo de derechos humanos aseguró que “la falta de información sobre el estado físico y psicológico de Monseñor Álvarez” así como “la inexistente prueba de que está con vida, es alarmante”.

Secuestro del obispo más crítico a la dictadura Ortega-Murillo

Monseñor Álvarez fue secuestrado por la guardia sandinista bajo el mando del comisionado Sergio Gutiérrez y por órdenes directas de la pareja dictatorial desde el 04 de agosto, cuando se encontraba en la Curia Episcopal de Matagalpa junto a otros siete religiosos.

El 19 de ese mismo mes, la misma guardia trasladó a siete religiosos, entre sacerdotes, laicos y un camarógrafo que acompañaban al obispo, a las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial, conocidas como el Nuevo Chipote, mientras que a Monseñor supuestamente lo encerraron en la casa de sus padres en Managua. Desde entonces no se tiene ninguna información sobre el líder católico de Matagalpa.

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Mientras los otros siete religiosos ya han sido llevados ante la juez sandinista, conocida como la verdugo de los sacerdotes y de opositores, Nadia Nadezda Ubeda Obando, quien los procesa por el supuesto delito de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas”.