Juez federal cuestiona si la pobreza es motivo para aplicar al Parole Humanitario

Tras el inicio del juicio que definirá el futuro del Parole Humanitario impulsado por el presidente de Estados Unidos Joe Biden en enero de este año, el juez federal Drew Tipton, quien está a cargo de la demanda presentada por 21 gobernadores de orden Republicano, cuestionó que si vivir en la pobreza es suficiente para que una persona sea beneficiada con la política migratoria que le permite permanecer en el país norteamericano por dos años consecutivos de forma legal.

Texas y otros 20 estados republicanos entablaron una demanda contra dicho programa, al que acusan de ser un “sistema de inmigración clandestino” que deja entrar a casi todos los solicitantes del Parole, en su mayoría por temas de pobreza.

Por tanto, el juez federal Drew Tipton cuestionó que una “gran parte del mundo” vive en la pobreza y por el hecho de que vivan en esa condición cuestionó si eso se considera una necesidad humanitaria urgente.

La pregunta la hizo el juez Tipton mientras se presentaban los argumentos finales de Esther Sung, abogada del Justice Action Center, en el juicio en Victoria, Texas, según un reporte del diario de Los Ángeles Times.

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En contraparte, los abogados de los estados demandantes aludieron que el gran número de inmigrantes que han sido admitidos bajo el programa humanitario en Estados Unidos, “demuestra que los funcionarios están otorgando dichos permisos en masa y no caso por caso, como exige la ley”, que debe pasar los filtros de seguridad para aplicar al estatus legal.

Ante esto, los partidarios del programa defendieron que no todos los casos son aprobados y que cada uno de ellos se revisa de forma individual, pese a que no han brindado un reporte oficial de cuántos casos han sido rechazados por no cumplir los requisitos estipulados en la Ley para aplicar al programa de visas.

Además, añadieron que los casos aprobados no solamente han sido por temas de pobreza, sino también porque los migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela huyen de regímenes opresivos, de la escalada de violencia y de condiciones políticas que han puesto en peligro sus vidas.

Asimismo, argumentaron que esta política migratoria impulsada por Biden, ha ayudado a reducir la presión sobre los recursos y los agentes fronterizos en la frontera entre Estados Unidos y México.

“Migrantes generan gastos”

Durante el primer juicio este pasado 24 de agosto, el representante legal del Estado de Texas, uno de los Estados que más ha criticado la llegada de migrantes a los Estados Unidos, manifestó que esta política migratoria ha generado el gasto de millones de dólares en atención médica y educación pública debido a la afluencia de inmigrantes admitidos por el Parole Humanitario, pese a que uno de los requisitos para aplicar al programa, es contar con un patrocinador que apoye con vivienda y económicamente al beneficiado.

En ese sentido, Tipton cuestionó a los abogados de Texas que cómo podía el estado alegar pérdidas financieras si las estadísticas presentadas por los abogados pro migrantes muestran que el programa de permiso humanitario ha reducido significativamente el número de migrantes en la frontera de Estados Unidos en más del 90%.

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Al finalizar el juicio, el juez federal manifestó que por el momento no emitirá una orden temporal que suspendiera el programa de permiso humanitario en todo el país, “ya que hay estados que señalan que la iniciativa los ha beneficiado”.

Definir el futuro del Parole Humanitario podría durar entre tres a seis meses. Hasta el momento el programa ha beneficiado a más de 72,000 haitianos, 63,000 venezolanos, 41,000 cubanos y 34,000 nicaragüenses.