El destituido presidente de Perú Pedro Castillo pide oficialmente asilo a México

El expresidente de Perú, Pedro Castillo, quien guarda prisión provisional tras un intento de golpe de estado con el que pretendía disolver el Congreso peruano, presentó una solicitud oficial de asilo en México.

Castillo, quien ya lo procesa la justicia peruana por “rebelión” y “conspiración”, no recibió el apoyo de los militares ni de la fuerza policial para sus planes de disolver el Parlamento, por lo cual la misma policía lo detuvo y lo trasladó a un penal de Lima, donde el juez supremo Juan Carlos Checkley ordenó este jueves siete días de detención preliminar.

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El Embajador Pablo Monroy me reporta desde Lima que pudo entrevistarse a las 13:20 horas con Pedro Castillo en el Centro Penitenciario. Lo encontró bien físicamente y en compañía de su abogado .

— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) December 8, 2022

El ministro mexicano de Asuntos Exteriores, Marcelo Ebrard, informó este jueves que Pedro Castillo había ratificado ante el embajador de México en Perú, Pablo Monroy, una solicitud de asilo al Gobierno mexicano.

“El Embajador Pablo Monroy me reporta desde Lima que pudo entrevistarse a las 13.20 horas con Pedro Castillo en el Centro Penitenciario. Lo encontró bien físicamente y en compañía de su abogado”, escribió Ebrard.

“Hemos procedido a iniciar consultas ante las autoridades peruanas. Les mantendré informados”, expresó el funcionario mexicano.

López Obrador se compadece de Castillo

El propio presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador también dijo este jueves que Castillo llamó por teléfono para pedir asilo a la Embajada de México de Perú.

“Habló aquí a la oficina para que me avisaran de que iba hacia la Embajada, que iba a solicitar el asilo y que si le abrían la puerta de la Embajada, pero seguramente ya tenían intervenido su teléfono”, dijo López Obrador.

El también izquierdista presidente mexicano agregó “pero al poco tiempo tomaron la embajada con policías y ciudadanos, rodearon la embajada, y él ni si quiera pudo salir, lo detuvieron de inmediato”.

Este miércoles, Perú vivió momentos de tensión que en menos de seis horas acabaron con el mandato de Pedro Castillo.

Poco antes de que el Congreso debatiera su destitución, Castillo denunció lo que calificó de “ataque sin cuartel” por parte del parlamento y anunció su disolución, anunciando un toque de queda y dijo que gobernaría por decreto.

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Esto fue interpretado como un intento de golpe de estado por parte de la calase política peruana, incluso los del propio partido de Castillo, por lo cual los parlamentarios procedieron a destituirlo con 101 votos a favor y seis en contra por incapacidad moral.

La que era su vicepresidenta, Dina Boluarte, asumió este miércoles la presidencia, convirtiéndose en la primera mujer presidenta de ese país suramericano.